Los comentarios del dirigente panista Marko Cortés no le quitan el sueño a la titular de la Secretaría de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, pues tiene problemas y circunstancias que atender de altísimo calibre, afirmó el subsecretario de esa dependencia, Ricardo Peralta.
Luego de que el líder del Partido Acción Nacional (PAN) acusara que la ministra en retiro negoció junto con la presidenta de Morena desde principio de año ampliar la próxima administración de Baja California, fue más allá y mencionó que también le ofrecieron mantener al albiazul en la gubernatura interina tras la muerte de la gobernadora Martha Erika Alonso si apoyaba la reforma bajacaliforniana.
"Ellos insistieron, de hecho trataron de hacerlo a cambio de respetarnos la gubernatura interina en Puebla, que la propuesta que había hecho Acción Nacional pudiera transitar en el Congreso poblano donde había mayoría morenista", acusó Cortés Mendoza.
Peralta comentó que es una afirmación que debe probarse. "Seguramente él tendrá constancia de ello, porque hay que soportar cualquier dicho. Es una persona honorable, pero tiene que probarlo", dijo el funcionario, y agregó que esos dichos no quiebran la relación institucional de la dependencia federal con el partido, pues una declaración no pone en tela de juicio el prestigio de Olga Sánchez Cordero.
Por su parte, la dirigente de Morena, Yeidckol Polevnsky, mencionó que su homólogo panista todo lo quiere voltear. "Marko cree que soy súper poderosa, pero no, que no invente historias, yo he dicho que del PAN no van a quedar ni las migajas y así va a ser. Qué penoso es el papel del presidente del PAN, que ha hecho una campaña muy importante pero demuestra lo que son, fascistas. Dice a su gente: 'Votaste a favor, te corro'. Tendría que darle vergüenza la posición en la que está".
El vocero del PAN, Fernando Herrera, señaló que el caso de Baja California es una acción táctica dentro de una estrategia muy bien diseñada para construir una dictadura en el país, mientras el presidente del Senado, Martí Batres, afirmó que no le consta que Olga Sánchez Cordero, haya presionado al PAN por la Ley Bonilla. “A mí no me consta que eso sea cierto’’.
Para el diputado poblano del PT, José Juan Espinosa, las declaraciones de Cortés no tienen fundamentos, ya que cuando se decidió el proceso de gobierno interino él era presidente de la Mesa Directiva del Congreso del estado y Olga Sánchez, afirma, nunca intervino. El gobierno estatal señaló ayer que su actual mandatario, Guillermo Pacheco, fue nombrado en un proceso apegado a la Constitución.