En su último día de actividades públicas como presidente de la República y comandante supremo, Enrique Peña Nieto, convocó a los integrantes del Estado Mayor Presidencial para que en la nueva etapa del país, sigan consolidando con lealtad y patriotismo el prestigio y la grandeza de las Fuerzas Armadas.
“A todos ustedes mi reconocimiento y admiración. Cada uno de ustedes reciba mi mayor reconocimiento y gratitud. Muchas gracias y misión cumplida”.
El Jefe del Estado Mayor Presidencial, Roberto Miranda, respondió que “pasará a la historia como el último presidente de México en la época actual en contar con un cuerpo especial de seguridad integrado con personal de las Fuerzas Armadas”.
Juntos realizaron 68 giras internacionales, 513 en México y asistieron a más de mil reuniones en la capital del país. Andrés Manuel López Obrador, quien asumirá la presidencia de la República, determinó que no contará con la vigilancia ni servicios del MP.
En el Campo Militar Marte, Peña Nieto indicó que durante más de un siglo, el Estado Mayor Presidencial ha sido garante de la seguridad de los Presidentes de México por lo que “rindo un merecido homenaje a quienes han formado parte de este cuerpo militar de élite”.
Y defendió a los miembros de este cuerpo, que desde las primeras horas del 1 de diciembre regresarán a sus agrupaciones en las Fuerzas Armadas: “Mujeres y hombres de probada lealtad, férrea disciplina y una profunda vocación de servicio que con su labor han defendido los principios de democracia, soberanía y federalismo”.
Peña Nieto estuvo acompañado de los suyos, de quienes lo acompañaron durante su encargo por seis años. Ahí estuvo Emilio Gamboa, el priista que como coordinador le ayudó a concretar los acuerdos del Pacto por México que consolidaron las reformas estructurales con el aval de la oposición, en el primer trienio de su gobierno. Se dio cuenta que fueron 68 las internacionales en el que el EMP custodió al mandatario mexicano y colaboraron en mil eventos en la CdMx.
Cabe destacar que Enrique Peña Nieto recibió de manos del General Roberto Miranda varios reconocimientos entre los que destacan el Bastón de Mando y una réplica del soldado de guardias presidenciales, así como una placa de agradecimiento de los elementos y el texto del Himno del Estado Mayor.