El Gobierno federal no pueda dar un borrón y cuenta nueva en materia educativa, ya que pese a que hay cosas que deben de mejorarse, también existen avances que deben de consolidarse pese a las coyunturas políticas, afirmó la consejera del Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación, Sylvia Schmelkes del Valle.
“En educación es importante impedir tres inercias: la que conduce a evitar a toda costa los conflictos para asegurar estabilidad política y, por tanto, a conceder a intereses creados; la que lleva a beneficiar más a quien más tiene o a quien más se hace escuchar, y la que privilegia a lo que más reditúa políticamente”, afirmó la consejera durante una ponencia en la Universidad Iberoamericana, campus Puebla.
BAJOS Y DESIGUALES APRENDIZAJES
Schmelkes del Valle comentó que la actual administración heredó un sistema educativo con severos problemas, tales como cobertura; bajos y desiguales aprendizajes; una enorme desigualdad; con un magisterio resentido y una cúpula sindical que intenta recuperar las plazas.
“Entre 2014 y 2018, de seis de cada 10 alumnos están por debajo del nivel suficiente en matemáticas; cinco de cada 10 en lenguaje y comunicación, y que en las escuelas indígenas ocho de cada 10 niños se encuentran en el nivel insuficiente, en ambos campos.
También está la problemática de la deserción escolar, ya que cada año abandonan 84 mil niños la primaria, cerca de 300 mil la secundaria y aproximadamente 700 mil jóvenes la educación media superior; es decir, un millón 100 niños y jóvenes pierden la posibilidad de terminar su educación obligatoria cada año.