“Manchan movimientos justos que tienen toda la justificación”, reclamó el presidente Andrés Manuel López Obrador a los 100 encapuchados que violentaron la marcha pacífica de los padres de los 43 normalistas de Ayotzinapa.
Sin embargo, insistió en que no usarán la fuerza para detener este tipo de transgresiones en las manifestaciones, para no caer en provocaciones ni hacerle “el caldo gordo” a los grupos conservadores que se hacen pasar por “anarquistas”.
“Que se portan mal, muy mal, que no tienen respaldo de los ciudadanos, que ni son de izquierda, que son conservadores, que perjudican al movimiento legítimo, justo de los familiares de los jóvenes, que quieren encontrar a los estudiantes desaparecidos, porque no participan en la marcha, van en paralelo destruyendo”, criticó durante la conferencia mañanera.
Ante los reclamos de quienes exigen que se use la fuerza con moderación en estas circunstancias, López Obrador se pronunció por aplicar la ley y confirmó que el gobierno de la Ciudad de México investiga a los agresores.
“Gritan como pregoneros, que hay que usar la mano dura, porque así es esto, debe de hacerse valer la legalidad, tienen que respetarse la ley pero sin usar la fuerza, porque por eso son provocadores”, comentó.
Insistió que se debe actuar con prudencia y los hechos de ayer no corresponden a la ideología anarquista, tras poner de ejemplo a Ricardo Flores Magón como un respetuoso de las leyes y del orden social.