A pesar de sus derrotas en 11 estados que estaban en juego las gubernaturas y perder mayoría en 18 congresos locales, los partidos PRI, PAN y PRD que integraron la Coalición “Va por México”, anunciaron que refrendarán su alianza en el plano legislativo el próximo mes de septiembre en la Cámara de Diputados, con el objetivo de frenar al presidente Andrés Manuel López Obrador.
En conferencia de prensa, los dirigentes nacionales de estos 3 partidos, a manera de justificación, calificaron como potente y exitosa la coalición electoral que crearon, al grado que destacaron que Morena no logró la mayoria calificada ni con sus aliados y señalaron que a pesar de perder 11 gubernaturas, se recuperaron en el Congreso federal del descalabro que sufrieron en las elecciones de 2018.
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En su oportunidad, el dirigente nacional del PAN, Marko Cortés, expresó que “la coalición legislativa está en condiciones de impedir caprichos. Logramos el cometido, hoy tenemos más de un tercio de la cámara de diputados”, aseguró el panista.
En la conferencia, el dirigente panista expresó que ya nombró al diputado Jorge Romero y Santiago Creel como coordinadores para entablar relación con el PRI y PRD, y confirmar un bloque legislativo que haga frente a Moren.
Fuentes allegadas a este rotativo señalan que Romero sería el próximo coordinador parlamentario del PAN y propondrían a Creel Miranda como presidente de la Mesa Directiva; en tanto el enlace de trabajos legislativos del PRI será el diputado Rubén Moreira, mientras que Luis Espinoza Cházaro coordinará los trabajos parlamentarios del PRD.
Por su parte, el dirigente del PRI, Alejandro Moreno, manifestó que el país “apostó porque haya pesos y contrapesos”, y envió un mensaje claro a quien no sabe gobernar.
Subrayó que la coalición fue un éxito en todo el país y se recuperaron de la derrota de 2018. Mientras dijo que su crecimiento fue gracias a la clase media.
El líder del PRD, Jesús Zambrano, acusó que Morena tuvo apoyo del crimen organizado y adelantó que van a pelear lo necesario y no van a dar consentimiento para que el presidente López Obrador pisotee la Constitución.