La ministra de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Yasmín Esquivel Mossa, consideró que la designación por voto popular de jueces federales y locales no es el único problema del Poder Judicial a resolver, ya que quienes trabajan en juzgados sufren de escasez.
“Debamos evitar suponer que la reforma al Poder Judicial es una especie de sanción a las personas juzgadoras que retribuya el mal desempeño. Pues quienes hemos servido a la impartición de justicia desde diferentes órdenes de gobierno conocemos de forma directa la escasez con la que se trabaja y el mucho esfuerzo que se invierte en ello”, dijo en su intervención en el Foro de la Reforma al Poder Judicial, efectos en beneficio de la Ciudad de México.
“No podemos pensar que al modificar solamente el proceso de designación de las personas juzgadoras, mágicamente se va a resolver el problema de justicia”, agregó.
La ministra habló a favor de la reforma al Poder Judicial presentada por el presidente, Andrés Manuel López Obrador, y propuso: hacer una revisión integral al juicio de amparo, particularmente en materia administrativa; la deficiente integración de carpetas de investigación o expedientes y la ausencia de recursos económicos para fortalecer el número de juzgadores, ministerios públicos, defensores públicos y asesores jurídicos para desahogar la demanda de justicia.
En el evento también participó la ministra Loretta Ortíz Ahlf, quien expresó que la reforma se dividía en tres temas principales: la elección de los integrantes del poder judicial, tanto federal como local; que los procesos no pueden alargarse más de seis meses y el tema de la austeridad en el poder judicial. Agregó una sugerencia que no está en la iniciativa, que es incorporar dentro del artículo 17 de la constitución a la mediación de forma obligatoria, uno de los mecanismos alternos de solución de controversias.
La ministra Ortiz afirmó que en el Centro Alternativo de Solución de Controversias de la Ciudad de México se resuelven los asuntos en tres días, sin importar si son de materia penal, civil, administrativa e incluso fiscal.
“No se van a necesitar más jueces o magistrados, porque muchos asuntos se vana resolver mediante la mediación. Muchas personas prefieren, antes de pagar un abogado, ir a un mecanismo que les permita resolver su conflicto”.