El presidente Andrés Manuel López Obrador propuso a los legisladores realizar la revocación de mandato el 21 de marzo del 2021, apenas tres meses antes de las elecciones intermedias federales.

“Que no se gaste más, que el mismo gasto que se contemple para el 21 incluya también lo de la consulta para la revocación de mandato, y si ni se acepta hacerla el mismo día de la elección federal, que se adelante sin costo adicional para la consulta de la revocación de mandato”, sugirió durante la conferencia mañanera.

Explicó que sus opositores argumentan que si la revocación de mandato, se realiza al mismo tiempo que las votaciones para diputados federales, podría “sumar simpatías al partido al que pertenezco”.

López Obrador considera que si se realiza antes la consulta, no interferirá con el proceso electoral y se mantiene la propuesta inicial de no gastar más recursos federales, pese a que se trate de dos procesos electorales y se siga realizando justo en el periodo de campañas.

Aseguró que no beneficiará a ningún candidato o partido político, “porque no es el mismo día”, pero si mantienen la negativa, entonces, insistirá en que se lleve a cabo la revocación de mandato durante la renovación de los diputados federales en San Lázaro.

Cuestionó que si un mandatario fue elegido por seis años y si hace un mal trabajo, debe ser aguantado durante todo el periodo o es mejor que se le quite del cargo.

“Si se elige a un presidente o un gobernador por seis años, y si a los dos, tres años hay evidencias de que no sirvió, ¿por qué aguantar?”, inquirió.