El presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que luego de que el gobierno de Austria negó el préstamo del Penacho de Moctezuma a su gobierno para la exposición “La Grandeza de México”, las relaciones con ese país europeo se enfriaron un poco.
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Al ser cuestionado en su conferencia de prensa matutina de este miércoles por el estado que guardan las relaciones de México con Austria tras este incidente, el mandatario expresó que luego que envió una carta a Austria con su esposa, Beatriz Gutiérrez Müller y no hubo respuesta, él sintió que el país europeo no estaba en condiciones de estrechar más las relaciones con México.
“A partir de que no hubo respuesta no sentimos que ellos estuviesen en condiciones de estrechar más nuestras relaciones, se enfriaron un poco”, dijo el presidente.
Asimismo, el mandatario mexicano no descartó la posibilidad que en un futuro el penacho de Moctezuma regrese al país, así como otras piezas prehispánicas que fueron robadas de México, pues reiteró que es una demanda permanece de los mexicanos.
“No solo el Penacho (regresaría a México), sino muchísimas otras piezas que se han sustraído de manera ilegal, que se han robado de México y que se venden en subastas o están en otros países”, expresó.
Por otra parte, el presidente López Obrador habló en su conferencia de prensa de las relaciones dé México-España y la llegada a nuestro país del canciller ibérico, José Manuel Albares, de quien dijo que es bienvenido.
Asimismo recordó que la “pausa con España” a la que refirió hace unas semanas se refiere a las relaciones con algunas de las empresas españolas.
“Que bien que esté aquí el canciller de España (Albares) y vamos a buscar restablecer por completo, por entero las relaciones, cuando se entienda que vivimos una etapa nueva en la vida pública de México”, dijo el presidente.
Recalcó López Obrador que cuando se refiere a una pausa con España es para que “se internalice” lo que ocurrió en la relación que hubo antes con las empresas ibéricas, a quienes ha acusado de abusar junto con pasados gobernantes de los bienes de México.
“Yo cuando hablo de pausa es para que políticamente se internalice una realidad, la relación anterior con España estuvo caracterizada por el abuso de empresas españolas en nuestro país y aunque cuesta mucho trabajo que se acepte, que se comprenda, México no es tierra de conquista”, concluyó el mandatario.
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En otras ocasiones el presidente se ha quejado de empresas españolas que abusaron de contratos ventajosos que lograron en contubernio con funcionarios mexicanos y, particularmente, ha mencionado a Iberdrola, empresa especializada en energía y a la constructora OHL.
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