Víctor Manuel Villalobos Arámbula, secretario de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader), aseguró que cada año se utilizaban unos 35 mil millones de pesos para controlar políticamente a los campesinos, por lo que se comprometió a ejercer el presupuesto de manera eficiente, transparente y cero corrupción.
“Cada año se dilapidan 35 mil millones de pesos del presupuesto en el control político de la gente del campo”, dijo el funcionario designado por Andrés Manuel López Obrador a los integrantes de la Comisión de Desarrollo y Conservación Rural, Agrícola y Autosuficiencia Alimentaria. El responsable de la agenda agrícola declaró que se generará un esquema de rendición de cuentas, que permita medir y evaluar el ejercicio presupuestal.
Se espera que el recurso alcance, ya que anteriormente, el dinero destinado a los pequeños productores se quedaba en diferentes rutas, y ahora se evitará la desviación de fondos y la corrupción, al eliminar intermediarios, para que realmente los apoyos lleguen a quienes más lo necesitan, expresó el ingeniero.
Villalobos Arámbula manifestó que trabajará en el rescate del campo, ya que es necesario regresarle a México la autosuficiencia alimentaria y mejorar la calidad de vida de la sociedad rural, productores, campesinos e indígenas. Los legisladores están preocupados por el presupuesto que se destinará para el próximo año en el campo, ya que lo fundamental para la vida de todos los mexicanos es la alimentación, expresó Eraclio Rodríguez Gómez, presidente de la Comisión.
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El diputado de Morena recordó que se ha deteriorado la productividad y abandono de 200 mil productores en la última década, con la pérdida de su patrimonio por los altos costos de operación que los coloca al borde de la quiebra, con carteras vencidas en el centro y norte del país, apuntó. Se debe definir un presupuesto que atienda la crisis de productividad del sector y redireccionar recursos hacia la comercialización de productos, establecer nuevas estrategias que potencien los recursos mediante la agricultura por contrato, y abandonar el sistema anquilosado de la compra de coberturas, manifestó el legislador.
No se puede dejar de invertir en el campo porque alentaría la importación, dependencia del país y se pondría en riesgo la seguridad alimentaria del pueblo
Rodríguez Gómez
En anteriores administraciones se destinó sólo el 17 por ciento del PIB para desarrollar el agro, y de ese porcentaje, sólo el 7 por ciento se aplicó a programas productivos, manejando mal los recursos sin atender a los pequeños campesino, agregó.
Eraclio Rodríguez pidió revisar los padrones de beneficiarios de los apoyos al campo, porque muchos productores abandonaron sus parcelas al no soportar la mala situación económica.
Los funcionarios reparten despensas a costa de la desgracia de los productores
Eraclio Rodríguez Gómez
