El Pleno del Senado aprobó a Galia Borja Gómez como subgobernadora del Banco de México, quien destacó que existe una brecha financiera que hay que cerrar y Banxico, como el encargado de sistema de pagos y de regulador, junto con diversas instancias de la Secretaría de Hacienda, tiene ante sí el reto de lograr una profundización del sistema financiero.
La propuesta del Ejecutivo para que Borja Gómez sea miembro de la Junta de Gobierno de esa institución financiera, fue avalada por 84 votos y nueve en contra, para un periodo de ocho años; la Mesa Directiva le tomó la protesta de Ley.
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Previamente, durante su comparecencia ante comisiones, dijo que el acceso a diversas fuentes de financiamiento y la canalización de recursos hacia sectores que han estado excluidos de mecanismos eficientes de financiamiento, incrementa la capacidad productiva y operativa de las empresas, además de que dota de mayores oportunidades a la población en general; por lo que esta es una palanca de desarrollo que se estimular.
La exTesorera de la Federación apuntó que la inclusión financiera es un facilitador clave para reducir la pobreza e impulsar la prosperidad; sin embargo, los niveles de profundidad del Sistema Financiero Mexicano son aún delgados.
Además, el efectivo es el medio de pago en las transacciones más comunes. El 98 por ciento de las compras de 500 pesos o menos, se realizan en efectivo.
Solamente el 68 por ciento de los mexicanos cuentan con algún producto financiero, como un AFORE, un seguro, un crédito; y menos de la mitad, 47 por ciento de los mexicanos, una cuenta bancaria.
La independencia, dijo Galia Borja en la Comisión de Hacienda, le otorga al Banco de México la capacidad de cumplir con su objetivo institucional, garantizando distancia del ciclo político y de las necesidades fiscales de los gobiernos.
Refrendó que con la autonomía de la Banca Central, la confianza tiende a quedar cimentada en mandatos institucionales sólidos.
“El Banco Central no es únicamente el banco del Gobierno Federal: es el banco del sistema financiero nacional y su ley indica que su finalidad, es la de proveer a la economía del país de moneda nacional, y la consecución de esta finalidad tendrá como objetivo prioritario, procurar la estabilidad del poder adquisitivo de la moneda’’.
Borja Gómez explicó que el objetivo de la estabilidad de precios es tan relevante, ya que alcanzarlo ayuda a generar crecimiento, permite estabilidad en el empleo, mantiene el poder adquisitivo de las personas y las familias, y da certidumbre a las transacciones económicas y a los proyectos de inversión de largo plazo.
No podemos, por ello, subestimar la estabilidad de precios, pues, en el caso de que ésta no exista, veríamos un deterioro del nivel de vida de las familias y un aumento en la desigualdad, ya que la inflación es más dura con los que menos tienen, apuntó la funcionaria.
Asimismo, añadió, la inflación genera incertidumbre y hace inviable muchos planes y proyectos en el largo plazo.
Observó tres características que aportan en el logro de dicho objetivo: Las herramientas de política monetaria, la independencia del Banco Central y la rendición de cuentas, que incluye la comunicación vía reportes de inflación y minutas de decisión de política monetaria, entre otros.
La labor que el banco ha realizado en los últimos años, al respecto de la estrategia de comunicación, de sus objetivos y decisiones, le ha conseguido una enorme credibilidad.