El Senado de la República reconoció que existe una “presión social sin precedentes’’, que exige cambios profundos en la manera de concebir y tratar a las mujeres, desde la sociedad, la economía y el Estado.
Esa institución legislativa destacó que es momento de estar a la altura de los retos que se enfrentan y actuar en consecuencia para saldar las deudas históricas de género que el país arrastra.
En voz de la presidenta de la Mesa Directiva, Mónica Fernández Balboa, respaldó el movimiento de este lunes "El nueve ninguna se mueve", con el que distintas organizaciones feministas convocan a valorar la importancia de las mujeres en la economía, empresas, instituciones públicas y en la sociedad.
Un día sin mujeres, explicó, constituye un llamado de atención a la sociedad y al Estado mexicano en el sentido de transformar el orden de las cosas que limita y vulnera a este sector de la población de manera cotidiana.
La morenista destacó que el paro de este día 9 de marzo, recuerda que México no podría funcionar sin la existencia y participaciones de sus mujeres.
Como sociedad y como Estado debemos hacer nuestra la protesta de las mujeres. Lo que buscan, y por lo que están luchando, cada una desde su trinchera, es vivir en una sociedad en la que se pueda ejercer los mismos derechos que los hombres. ¡Este nueve ninguna se mueve!, expresó la senadora.
Asimismo, indicó que la Cámara de Senadores hace suyas las demandas de las mujeres que salieron a las calles a manifestarse en contra de la violencia de género.
Aseveró que cambiar la realidad, profundamente desigual, requiere de leyes, presupuestos, políticas públicas, representantes y autoridades con perspectiva de género, pero, sobre todo, de cambios profundos en el sistema social y cultural.
Mónica Fernández resaltó que “hoy, como nunca, la violencia de género y la discriminación contra las mujeres ocupan un lugar central en la agenda pública nacional", subrayó.