Otto Granados Roldán, secretario de Educación Pública, dijo que frenar la Reforma Educativa tendría costos muy elevados para México; sería muy trágico, y se evitaría dar a los niños instrumentos y herramientas de calidad para salir adelante.
Al presentar los avances en la instrumentación de la Reforma Educativa en prácticamente todo el país, consideró que el marco constitucional es suficientemente bueno para hacer mejoras en los diferentes componentes de la reforma, como ya se hace.
En la residencia oficial de Los Pinos, acompañado por el vocero presidencial, Eduardo Sánchez Hernández, destacó que la sostenibilidad de la reforma educativa dependerá de ciclos de política relativamente largos y continuados.
Comentó que con la reforma se recuperó la rectoría del Estado, y se pasó de un sistema clientelar, corporativo y discrecional, a otro de obligaciones y derechos, claro, transparente, meritocrático y verificable. Granados Roldán dijo también que hay contacto permanente con el gobierno de Oaxaca, para regularizar el servicio educativo lo más pronto posible, para garantizar el derecho de los niños a una educación de calidad, y precisó que más del 90 por ciento de las escuelas tienen actividades normales.
En conferencia, señaló que esa transformación es la mejor valorada, con 64%, en todas las encuestas nacionales levantadas entre población abierta y en vivienda: 79% aprueba las evaluaciones a los docentes; 71%, que las escuelas tengan jornada ampliada; 71%, que se estén remodelando los planteles; 89%, que se busque que los maestros tengan un alto nivel de inglés, y 60% de los docentes piensan que la evaluación es “fundamental” para su desarrollo profesional.