La Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) dio luz verde al presidente Andrés Manuel López Obrador para que continúe promoviendo su último libro, titulado “Gracias”, en su conferencia de prensa mañanera, pues los magistrados consideraron que prohibirle hablar del libro constituiría censura previa.
Xóchitl Gálvez, candidata presidencial de la coalición Fuerza y Corazón por México, denunció al presidente López Obrador ante la Unidad Técnica de los Contencioso Electoral (UTCE) del Instituto Nacional Electoral (INE), por presuntamente incurrir en actos anticipados de campaña, uso indebido de recursos públicos y vulneración al principio de equidad en la contienda con la promoción de su libro en las conferencias matutinas. La candidata opositora solicitó que se frene la difusión del material, sin embargo, la autoridad electoral desechó la queja.
En sesión pública, los magistrados Mónica Soto Fregoso, presidenta de la Sala Superior, Felipe Fuentes Barrera y Felipe de la Mata Pizaña, votaron en contra del proyecto del magistrado Reyes Rodríguez Mondragón que proponía ordenar a la UTCE aceptar la queja y analizar el contenido; en su lugar confirmaron el desechamiento de la UTCE.
Durante la discusión, el magistrado Reyes Rodríguez expusó que la UTCE no analizó si las frases que Xóchitl Gálvez denunció eran violatorias de la normativa electoral, por promover a Claudia Sheinbaum, candidata presidencial de Sigamos Haciendo Historia (Morena-PT-PVEM) estaban presentes en el libro, pues la autoridad electoral indicó que no se anexó una copia del mismo para el análisis.
“En consecuencia, el INE, la Unidad Técnica ya no solicitó una copia impresa o una versión digital no comercial, simplemente concluyó que no contaba con un ejemplar ni físico, ni electrónico del libro y dijo no poder corroborar entonces los hechos denunciados”, dijo.
En tanto, el magistrado Felipe de la Mata aseveró que admitir la queja equivaldría a crear un “mecanismo de censura inaceptable” porque a las autoridades electorales no les corresponde juzgar libros.
“¿También vamos a censurar bibliotecas, vamos a quemarlas como en los años 40 o 30, en la Alemania nazi?Nuestro trabajo como autoridades electorales en el contexto del procedimiento especial sancionador no es juzgar libros, sino la propaganda”
“Por estas razones y con la firme convicción de que el solo hecho de permitir el inicio de un procedimiento para valorar el contenido de un libro, en los hechos y con independencia de su resultado, sería crear un mecanismo de censura inadmisible, lo digo con todo el respeto, y por supuesto estableciendo que sin duda puede haber opiniones diferentes”, dijo.
En dos conferencias matutinas, el presidente López Obrador acusó que el magistrado Reyes Rodríguez buscaba prohibir su libro como en la inquisición.
“No puedo pronunciarme porque van a sancionarme. Están muy estrictos los de la inquisición y hoy van decidir si prohíben o no el libro (“¡Gracias!”) entonces no puedo opinar”, dijo en la conferencia de prensa del 2 de abril.
AMLO celebra fallo del TEPJF
El presidente Andrés Manuel López Obrador celebró este miércoles que el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) fallara a favor de no prohibir la difusión de su libro “¡Gracias!” y aprovechó para criticar el estilo de vida de los Estados Unidos, al leer un pasaje histórico dentro de su obra.
“Celebro que, el día de hoy, el Tribunal Electoral resolvió no prohibir mi libro “¡Gracias!”, dijo el presidente en un video difundido en sus redes sociales.
Asimismo, López Obrador aprovechó para criticar el estilo de vida estadounidense, al leer en su obra un supuesto diálogo entre Robert Lansing, ex secretario de Estado de los Estados Unidos y el presidente de ese país, Thomas Woodrow Wilson.
“Miren: Capítulo 4. La Guerra Sucia y el desafuero —pero hago un paréntesis para dar a conocer una recomendación—: que en 1924 le hizo Robert Lancing, secretario de estado al presidente de los Estados Unidos, Wilson, 1924.
Miren lo que le recomendó su secretario de Estado al presidente de los Estados Unidos: ‘Mexico es un país extraordinariamente fácil de dominar porque basta con controlar a un solo hombre, el presidente. Tenemos que abandonar la idea de poner en la presidencia mexicana a un ciudadano norteamericano, ya que esto nos llevaría a otra vez a la guerra. La solución necesita de más tiempo. Debemos abrirles a los jóvenes mexicanos ambiciosos las puertas de nuestras universidades y hacer el esfuerzo de educarlos en el modo de vida americano, en nuestros valores y en el respeto al liderazgo de los Estados Unidos.
"México necesitará de administradores competentes. Con el tiempo esos jóvenes llegarán a ocupar cargos importantes y en eventualmente se adueñarán de la Presidencia, sin necesidad de que los Estados Unidos gaste un centavo o dispare un tiro, harán lo que queremos y lo harán mejor y más radicalmente que nosotros’”, leyó el tabasqueño.
A su vez, expresó que “se cumplió la profecía transitoriamente”, no sin antes asegurar que, ahora, “ya no es así.
Lo dicho por el presidente López Obrador genera suspicacia, porque el presidente Wilson dejó el cargo en 1921 y lo dicho supuestamente en su libro ocurrió en 1924, año en que murió ese presidente estadounidense.