Tres grupos se disputan el control de los trabajadores petroleros, esto luego de que Carlos Romero Deschamps presentara su renuncia a la dirección del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM).
Se trata de los grupos encabezados por Manuel Limón Hernández, quien representa la continuidad del grupo de Romero Dechamps, Mario Rubiciel Ross García, dirigente del ala disidente del sindicato petrolero, y Yolanda Morales Izquierdo, secretaria general del recién creado Sindicato Petroleros de México (Petromex).
Limón Hernández tomó el interinato de la dirección del STPRM luego de la renuncia de Romero Deschamps, y será el encargado de organizar el proceso para elegir al nuevo Secretario General, todo en un proceso de elección con voto libre, universal y secreto entre los agremiados.
Su trayectoria siempre la ha desempeñado con el grupo hasta el miércoles en el poder del Sindicato. Líder de la Sección 10 del STPRM y es actualmente diputado federal plurinominal por el PRI. Estaría buscando la dirigencia permanente, lo que significaría la continuidad del grupo del poder petrolero.
Por su parte, Mario Rubicel desconoció el interinato de Limón Hernández al frente del Sindicato Petrolero, ya que aseguró que éste buscará beneficiar a Ricardo Aldana Prieto en la elección que habrá que organizarse tras la renuncia de su exlíder Romero Deschamps.
“Les digo, es un gusano de la misma guayaba. Lo que trata es dejar que le cubran en la sus fechorías”, sentenció.
En este sentido, dijo que pronto se le hará justicia y asumirá la dirigencia del Sindicato Petrolero, pues adelantó que el próximo 19 de noviembre el Poder Judicial le otorgará el amparo por el que la Secretaría del Trabajo y previsión Social (STPS) le entregue la toma de nota como secretario general.
El tercer grupo que busca arrebatarle el contrato colectivo al STPRM es el Petromex. Liderados por la tabasqueña Morales Izquierdo, este nuevo sindicato busca obtener la mayoría de representados para que la Secretaría del Trabajo le otorgue la titularidad del contrato colectivo.
La apuesta es que ante las inconformidades al interior del STPRM, haya una desbandada a favor del Petromex.