El presidente Andrés Manuel López Obrador lamentó las cifras de violencia en México, mismas que sorprendieron a Michelle Bachelet, alta comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos.
Durante su conferencia matutina, el Ejecutivo calificó como "equivocada" la estrategia contra la delincuencia y señaló que se quiso "apagar el fuego con el fuego".
El primer mandatario excusó que la situación se ha complicado porque no existía una estrategia para atender los delitos de fuero común y resolver la seguridad pública.
Reiteró lo dicho sobre que tardará en bajar los índices delictivos y en que desde las seis de la mañana revisan los homicidios y robos cometidos en las últimas 24 horas, así como el comportamiento respecto a las jornadas anteriores.
Cabe recordar, que ayer el Gobierno mexicano firmó un acuerdo en materia de derechos humanos con Michelle Bachelet, quien manifestó que "no se puede lograr la seguridad pública sin el pleno respeto a los derechos humanos, y no se concibe el respeto a las garantías sin seguridad".
Por su parte, el canciller mexicano, Marcelo Ebrard, confirmó que la alta Comisionada de la ONU dará asesoría para la formación de la Guardia Nacional, así como para la Comisión de la Verdad del caso Ayotzinapa.