El presidente Andrés Manuel López Obrador confirmó que los seis mil elementos de la Guardia Nacional en la frontera sur, sí controlarán el paso de los migrantes centroamericanos a México.
“Si tenemos por ley que hacerlo y estamos haciendo todo lo que corresponde, pero al mismo tiempo estamos atendiendo el respeto a los derechos humanos y que se atienda el problema de fondo”, reconoció durante la conferencia mañanera.
López Obrador aseguró que con ello, no se violan las leyes migratorias de México ni los derechos humanos de los centroamericanos, porque realizarán labores de acompañamiento en el proceso de legalización de su estancia en nuestro país o el retorno.
Afirmó que no hay ningún impedimento para que la Guardia Nacional participe en labores migratorias porque constitucionalmente y en las leyes secundarias, ya se aprobó su participación en situaciones de seguridad pública.
“Es parte de un programa de seguridad y de acuerdo a la Constitución y a las leyes, puede apoyar en temas migratorios. Hay un marco legal que lo permite, pero es un plan nacional. Es de seguridad pública, pero pueden ayudar con esta función si se necesita”, defendió.
Recordó que lo mejor es que los migrantes permanezcan en la frontera sur porque corren peligro al intentar llegar a Estados Unidos, como se ha comprobado en casos como el de San Fernando.
Afirmó que tiene su conciencia tranquila y su gobierno está dispuesto a ayudar a Estados Unidos a resolver este fenómeno, sin dejar de insistir en que sólo se va a lograr desde sus causas.
“Yo quiero seguir siendo amigo del presidente de Estados Unidos”, expresó.
López Obrador comentó que continúa el plan de desarrollo integral para Centroamérica, para frenar la migración con crecimiento económico, creación de empleo y atención de los derechos humanos de “nuestros hermanos centroamericanos”, principalmente en Honduras, de donde han partido las caravanas migrantes.
Al ser cuestionado si se trataba de una moneda de cambio, luego de que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, opinó que México los necesita más, que México a ellos; López Obrador decidió guardar silencio, mientras levantaba las manos con la señal de amor y paz.
Respondió “soy dueño de mi silencio” y se limitó a decir que el posicionamiento lo dará a conocer mañana durante el mitin que realizará en la frontera de Tijuana.
Comentó que asistirán que en el acto público para llamar a la unidad, en torno a la lucha por la dignidad de México y la defensa de la amistad con Estados Unidos, hablarán todos los representantes de los sectores sociales.