La Arquidiócesis Primada de México llamó a reflexionar sobre lo que ha sucedido tras la explosión en Tlahuelilpan, Hidalgo, ya que pese a que un sector de la sociedad salió de manera positiva para apoyar las víctimas, hubo otro sector que demostró un lado negativo en el hecho que a la fecha lleva más de 100 víctimas mortales.
“Independientemente de las responsabilidades de unos y otros, es importante crecer en sensibilidad y tener cercanía ante el dolor de tantas personas afectadas. Una tragedia como esta exige que nos pongamos ante el espejo con los ojos que Dios nos mira y hacer una autocrítica para entender en qué estamos fallando, de qué forma somos parte del daño y reconocer que está en nosotros sanar interiormente, y no en lo que hagan los demás”, se pronunció la Arquidiócesis a través del semanario Desde la Fe.
El viernes 18 de enero pasado, un grupo de cientos de personas estaba recolectando gasolina que brotaba de una fuga de un ducto de Pemex; en eso, una chispa generó una explosión ocasionado más de 100 muertos, decenas de heridos y decenas de desaparecidos.
Tras estos hechos, hubo tanto muestras de solidaridad como críticas muy severas en contra de las víctimas, por lo que la iglesia pidió a los feligreses unirse en una autocrítica sobre los orígenes de esta tragedia.
Una tragedia como esta exige que nos pongamos ante el espejo con los ojos que Dios nos mira y hacer una autocrítica para entender en qué estamos fallando, de qué forma somos parte del daño y reconocer que está en nosotros sanar interiormente, y no en lo que hagan los demás
Por esto, la Arquidiócesis pide a toda la sociedad, sin importar que sean católicos o no, a sacar lo mejor de cada uno para dar el apoyo necesario en tiempos de crisis, como los que está pasando Tlahuelilpan, y así evitar que se repita un hecho así.
“En estos momentos, México necesita que saquemos la mejor versión de nosotros mismos; esa versión la encontraremos si ponemos a Jesús en el centro de nuestras vidas”, finaliza el editorial.