México redujo entre 2017 y 2018 el cultivo de amapola 9 por ciento, en comparación con el periodo anterior, 2016-2017, según el último Informe publicado por la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC).
De acuerdo con imágenes satelitales utilizada por la organización internacional, la superficie sembrada con amapola en el país se estimó en 28 mil hectáreas en 2017-2018, lo que equivale a 2 mil 600 menos respecto al periodo anterior.
Además, se observó que la siembra de esta droga se ubica principalmente en la Sierra Madre Occidental, concentrada en el denominado Triángulo Dorado donde convergen los estados de Sinaloa, Chihuahua y Durango. De esta región es originario el famoso capo Joaquín El Chapo Guzmán, hoy preso en Estados Unidos.
También se encontró una gran concentración de siembras de esta planta en la zona norte del occidental estado de Nayarit y en la Sierra Madre del Sur en el sureño estado de Guerrero, una de las regiones más empobrecidas de México y tradicional lugar de siempre de amapola.
De acuerdo con la información proporcionada por la Fiscalía General de la República a UNODC, el esfuerzo nacional de destrucción de superficie de amapola en el año 2018 registró un total de 2 mil 696 plantíos destruidos, teniendo una variación mínima de -1 por ciento respecto de los plantíos destruidos en 2017.
INCAUTACIÓN DE DERIVADOS
Sin embargo, la incautación de productos derivados de la amapola disminuyó de forma drástica, sobre todo en cuanto a la goma de opio se refiere, de la que fueron decomisados 346 kilogramos, 56 por ciento menos que en el periodo anterior.
Este proyecto, que goza de financiación del Gobierno de México, forma parte del Programa Mundial de Monitoreo de Cultivos Ilícitos de la UNODC en Viena.