La Secretaria de la Función Pública (SFP) informó que ante el riesgo de un rebrote de Covid, el regreso de los burócratas a sus centros de trabajo, aunque se encuentren vacunados, será progresivo, a fin de evitar riesgos de contagios y si se da un rebrote, se retomaría el “home office”, si existe riesgo de contagio.
El acuerdo de esta disposición de la ASF se publicó este lunes en el Diario Oficial de la Federación (DOF) y modifica el Artículo Primero de los criterios para la administración de recursos humanos de las dependencias y entidades de la Administración Pública Federal.
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En él, se dispone que “en caso de riesgo por brote de contagios en los centros de trabajo o que el servidor público presente síntomas del virus, se podrán aplicar las medidas determinadas en las fracciones II a IV subsecuentes”, a fin “de reducir el riesgo de contagio y dispersión del coronavirus SARS-CoV 2", mediante “el regreso a las labores presenciales en las instalaciones físicas de las dependencias y entidades de la Administración Pública Federal, de los servidores públicos que concluyeron el proceso de inmunización contra el Covid-19”.
Dichas medidas determinan que el trabajo a distancia se realizará en aquellos casos que sea posible y no altere el debido cumplimiento de sus funciones; señala que los días de trabajo y a distancia serán alternados; también, considera que los horarios laborales sean escalonados para la asistencia a los centros laborales y, finalmente, que su vigencia sea de manera indefinida por la pandemia.
El pasado 30 de julio, la SFP publicó en el DOF, el acuerdo en el que se considera viable continuar con el esquema de trabajo a distancia de los servidores públicos de la Administración Pública Federal, cuando la naturaleza de sus funciones así lo permita y sin alterar el cumplimiento de los objetivos institucionales a fin de garantizar el adecuado desempeño de la función pública bajo el principio de la buena administración.
Lo anterior, propiciando de forma paralela un escenario que permita procurar la seguridad y la salud de las personas servidoras públicas y sus familias de acuerdo con la evolución de la pandemia.
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Este acuerdo estableció, además, que: en el caso del regreso a las labores presenciales en las instalaciones físicas de las dependencias y entidades de la Administración Pública Federal, todos aquellos servidores públicos que concluyeron el proceso de inmunización contra el Covid-19, antes de su reincorporación, deberá aplicarse una prueba de detección de Covid-19.