El ciberacoso se puede definir como toda amenaza, agresión, hostigamiento y humillación realizada mediante medios digitales contra una persona que puede derivar en maltrato psicológico y emocional de la víctima hasta el suicidio.
La forma más común del ciberacoso es el chantaje con desnudos. Entre jóvenes es frecuente que utilicen el término "pack" para referirse al contenido íntimo de una persona, el cual puede ser utilizado para acosar a la víctima y someterla a una serie de abusos.
De acuerdo con datos de la Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana del Inegi, en el cuarto trimestre 2019 el 13.6% de personas mayores de 18 años en zonas urbanas en el país fueron víctimas de piropos groseros u ofensivos de tipo sexual o sobre su cuerpo que le molestaron u ofendieron en lugares públicos y un 9.6% de esta población fue acosada en el plano digital.
Este fenómeno se puede dar en diferentes formas, de acuerdo con la experta en educación especial Nancy Willard citada en la revista ¿Cómo Ves? de la UNAM, hay ocho formas de ciberacoso:
Outing: se comparten sin permiso secretos o información comprometedora sobre la víctima, incluyendo fotos y mensajes.
Flaming: enviar mensajes electrónicos con lenguaje vulgar, o discursos incendiarios para incitar a la pelea.
Acoso: incluye también mensajes ofensivos, pero se prolonga por mucho más tiempo.
Denigración: generar y difundir mentiras sobre alguien para destruir su reputación o alejar a sus amistades.
Imitación o enmascaramiento: el atacante finge ser otra persona para destruir la reputación o relaciones sociales de la víctima.
Cyberstalking (persecución cibernética): incluye altos grados de intimidación o amenazas de daño que hacen a la víctima temer por su seguridad.
Engaño: el agresor usa mentiras para que la víctima revele información personal muy delicada.
Exclusión: actos intencionados para mantener a la víctima excluida o alejada del grupo.
Ley Olimpia
Recientemente fue aprobada la Ley Olimpia en nuestro país la cual castiga con hasta seis años de prisión a quienes compartan fotos íntimas y con contenido sexual de una persona sin su consentimiento.
Dicha ley, lleva el nombre de Olimpia Coral Melo quien en 2012 accedió a grabar un video íntimo con su entonces pareja. Tiempo después, y sin su consentimiento, la grabación fue difundida en redes sociales y WhatsApp.
Esta situación destrozó la vida de Coral, quien incluso intentó suicidarse en tres ocasiones tras levantar denuncias y ser revictimizada.
Después de dos años, Olimpia venció la depresión que el acoso y las burlas le provocaron, y en 2014 fundó el Frente Nacional para la Sororidad y elaboró una ley para enviar a la cárcel a los responsables de subir a internet imágenes, videos y audios de contenido sexual difundidos sin consentimiento de los involucrados, conocida como la Ley Olimpia.
La Ley Olimpia implica tres reformas:
Reconocer los delitos contra la intimidad, es decir, la difusión de contenido íntimo sin consentimiento.
Reconocer el ciberacoso, el delito que genera violencia sexual en internet.
La Ley de Acceso que servirá para generar consciencia entre las instituciones sobre los derechos sexuales, la violencia digital y su difusión de esta entre los ciudadanos.
Recomendaciones
La Policía de Ciberdelincuencia Preventiva de la Ciudad de México recomienda lo siguiente para evitar ser víctima de ciberacoso:
Evita publicar información personal que pueda ser aprovechada por terceros.
Sé discreto con las imágenes que en redes sociales, utiliza los esquemas de seguridad.
Cambia constantemente tus contraseñas.
Busca tu nombre en línea y fíjate bien dónde apareces.
Asegurate que los contactos que aceptes en tus redes sociales los conozcas personalmente.
En caso de filtración de imágenes íntimas pide comprensión y apoyo de tu familia
Nunca respondas provocaciones.
Guarda las pruebas del acoso durante todo el tiempo, sea cual fuere la forma en que éste se manifieste, porque pueden serte de gran ayuda.
Toma medidas legales si no cesa la situación de acoso.
¿Dónde denunciar?
La Ley Olimpia se encuentra vigente en al menos 19 estados de la república y sigue aprobándose a lo largo del país, los últimos en legislar son Quintana Roo y Sonora.
Si eres víctima de ciberacoso puedes acudir a la fiscalía estatal que te corresponde a levantar una denuncia contra tu agresor.
Tienes que tener las pruebas del acoso, es decir capturas pantalla para reforzar la investigación.
En la Ciudad de México puedes contactar a la Policía Cibernética en el teléfono 52425100 extensión 5086 las 24 horas del día, o en sus redes sociales @UCS_GCDMX, o al correo policiacibernetica@ssp.cdmx.gob.mx
En el Estado de México contacta a la Unidad de Prevención e Investigación Cibernética en el teléfono 722 2758300 extensiones 12202, 12203, 12206 y 12207; en Twitter como @Cibernetica_MXQ, o al correo cibernetica.edomex@ssedomex.gob.mx