La prácticade la lactancia se recupera en México, y para mantenerla esnecesario que las políticas públicas y la regulación de lasfórmulas lácteas se apeguen al Código Internacional deComercialización de Sucedáneos, consideró el Fondo Internacionalde Emergencia de las Naciones Unidas para la Infancia(Unicef).
Entrevistada en el Jardín Botánico de Chapultepecdurante la Sexta Fiesta Mexicana de la Lactancia, la representanteadjunta de Unicef en México, Pressia Arifin Cabo señaló que en2012 solo 14% de los bebés en ese rango de edad recibíanexclusivamente leche materna, y en 2015 la cifra se elevó a30%.
Añadió que de los cero a los seis meses lo mejorpara la salud del bebé es alimentarse exclusivamente con lechematerna, “ni siquiera agua”.
El desconocimiento de los beneficios de la lactancia,la publicidad de sucedáneos y el estilo de vida de las mujeresactuales, quienes trabajan y buscan alternativas para alimentar asus hijos sin estar presentes, son las principales causas de que nose amamante, consideró.
Las fórmulas, dijo, jamás igualarán a la lechematerna, que es al mismo tiempo alimento y “vacuna” para losbebés, solo en casos graves o debido a problemas de salud, lamujer es incapaz de producir leche. Pero la mayoría de las veces,añadió, en realidad no saben cómo sacar la leche de su pecho ydesconocen que depende también de la demanda, es decir que entremás amamanten más leche producirán.
La edad recomendada por Unicef para dejar deamamantar a los hijos es a los dos años (24 meses), aunqueregularmente las mamás paran cuando ya no pueden.