La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) formuló siete propuestas, mediante un documento entregado a la Cámara de Diputados para incluirlas a la discusión sobre el etiquetado frontal de alimentos, entre ellas el establecimiento de un sistema de etiquetado nutricional de diseño universal, comprensible, de rápida lectura para los consumidores de todas las edades.
Asimismo que considere ajustes razonables para garantizar a las personas menores de edad que viven con discapacidad el ejercicio de su derecho a la información y libertad de elección, y mecanismos para sancionar el incumplimiento de la regulación que al efecto se emita.
Indicó que la iniciativa para el etiquetado frontal de alimentos, debe formar parte de una política pública integral para eliminar dichos problemas de salud, para lo cual debe escucharse a los titulares de los derechos y tener como eje rector el respeto, cumplimiento y garantía de los derechos humanos.
Expresó su satisfacción porque el Poder Legislativo discuta la iniciativa para el etiquetado frontal de alimentos, para garantizar la protección del derecho a la salud de la población, en especial de niñas, niños y adolescentes, ante el preocupante incremento de la prevalencia de sobrepeso y obesidad en el país.
Destaca que se debe elaborar con base en evidencia científica y los estándares internacionales, privilegiando la protección de niñez y adolescencia y los consumidores en general; prohibir expresamente el uso paralelo de otros sistemas de etiquetado frontal en productos alimenticios, e incluir la obligación para las autoridades competentes de adecuar la regulación sobre los criterios nutrimentales de los alimentos y bebidas industrializados a los establecidos por la Organización Mundial de la Salud respecto de la ingesta de azúcares para personas adultas y personas menores de edad.
Se debe dijo, homologar su aplicación para efectos de las normas sobre etiquetado frontal y el otorgamiento del Distintivo Nutricional por la Secretaría de Salud, que establezca controles efectivos de verificación, supervisión, monitoreo y sanción en caso de incumplimiento.
Además, se deberá designar una autoridad responsable para verificar científicamente que la proporción de azúcares, grasas, sales y otros elementos en los alimentos y bebidas coincida con la declaración de contenido y propiedades manifestado en la publicidad. Evaluar los conocimientos, actitudes y prácticas de los consumidores respecto del etiquetado, y considerar que éste sea herramienta para impulsar que la industria alimenticia reformule sus productos para reducir el contenido de elementos que propician sobrepeso y obesidad.
Así lo hizo saber el Ombudsperson nacional, Luis Raúl González Pérez, a la Presidenta de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados de la LXIV Legislatura, diputada Laura Angélica Rojas Hernández, mediante un escrito en que le informa de diversas consideraciones sobre dicho etiquetado, las cuales forman parte de una investigación más amplia respecto del sobrepeso y obesidad infantil que próximamente dará a conocer este Organismo Autónomo a la opinión pública.