La Suprema Corte de Justicia de la Nación, ordenó a la Secretaria de Salud y la Cofepris emita en un lapso de 180 días, un reglamento para el uso de marihuana para usos medicinal, ya que la falta de éste hace que muchas familias se vean obligadas a sembrar sus propias plantas de marihuana para sacar los extractos para uso medicinal, y que crezca el mercado ilegal donde no hay garantía de lo que se adquiere por falta de una regulación.
Con esto, ministros de la segunda Sala avalaron el proyecto del ministro Eduardo Medina Mora quién otorgo un amparo a Margarita Garfias, madre del menor Carlos quién sufre epilepsia por lo que sus padres deben importar medicamentos elaborados a base de aceite con cannabidiol, extraído de la marihuana, lo que es sumamente caro.
En la sala de la corte, estuvieron presentes Carlos y varios menores de edad que sufren de alguna enfermedad que requiere tratamiento a base de marihuana. Previo a la votación, el ministro Eduardo Medina Mora informo que su proyecto va por amparar al menor Carlos ya que la no publicación de un reglamento por parte de la Cofepris, vulnera los derechos de los menores en esta situación.
Por ello, propuso que se obligue a las Secretaría de Salud, cumpla con la obligación establecida en el artículo cuarto transitorio del Decreto por el que se reforman y adicionan diversas disposiciones de la Ley General de Salud y del Código Penal publicado en el Diario Oficial de la Federación el 19 de junio de 2017 y en consecuencia, proceda a armonizar, los reglamentos y normatividad en el uso terapéutico de la cannabis y sus derivados.
Dentro de los lineamientos se contemplará, de manera enunciativa y no limitativa: toda la cadena de producción, desde la obtención y almacenamiento de semillas, su cultivo, cosecha, procesamiento, transportación, comercialización, y en general todas las actividades dirigidas al consumo terapéutico, la investigación científica y la práctica médica de la cannabis.
Al respecto, es conveniente recordar que la regulación se refiere exclusivamente al uso terapéutico de la cannabis y sus derivados, por lo que no se incluyen otros usos.
Margarita Garfias madre de Carlos indico que esto es un triunfo pero habrá que esperar los 180 días para que la Secretaria de Salud público el reglamento, “lo que queremos por el momento es medicamento, es decir donde poder comprarlo y dejar de importarlos, las medidas y regulaciones vendrán después”.
Margarita señala que su hijo padece síndrome de West, que es una encefalopatía epiléptica infantil, para cuyo tratamiento es preciso recurrir a un aceite con cannabidiol, extraído de la marihuana.
Señala que la importación del aceite con cannabidiol, extraído de la marihuana que usa como medicina para su hijo, le cuesta entre 7 y 12 mil pesos, por lo que la falta de un reglamento ya que está permitiendo que crezca un mercado ilegal donde no hay seguridad de lo que se adquiere en México y las industrias no tienen regulaciones que puedan marcar su legalidad.
“Hay tantos aceites buenos y malos y uno no sabe y esto propicia ilegalidad y riesgo para los pacientes”.
Detalló que ella ha tenido que recurrir a sembrar su propia planta de marihuana para sacar los extractos que necesita Carlos, y así están muchas familias en la ilegalidad, orilladas por una omisión del ejecutivo por medio de la secretaría de salud.
Aunque el 19 de junio de 2017 se publicó un decreto para reformar la Ley General de Salud y el Código Penal Federal que permitan el uso medicinal de la marihuana, aún no se publica el reglamento respectivo que permitiría la producción nacional de este tipo de fármacos, lo que abatiría sus precios y eliminaría los costos de importación.