Según un estudio de Epidemiology Resources de la Universidad de Boston, el riesgo más grave que produce el teléfono celular en la salud humana es la de provocar accidentes de tránsito. "Uno de los momentos más peligrosos es al recibir una llamada, ya que aumenta bruscamente el ritmo cardíaco por la sorpresa y altera las pulsaciones y la actividad cerebral, incluso con el sistema manos libre".
Otro es al marcar o buscar un número, que requiere entre 5 y 10 segundos (a 120 kph significan entre 180 y 350 metros sin control adecuado) y se reduce la velocidad un 12%, lo que puede provocar accidentes por alcance. El riesgo aumenta con el paso de los segundos: en una conversación de 90 segundos, no se percibe un 40% de las señales.
Hoy, distraerse durante la conducción es uno de los principales factores de accidentes en todo el mundo. Un segundo de distracción a 100 kph, por ejemplo, significa recorrer 28 metros en que no sabemos qué ocurre en el tránsito porque nosotros estamos en otra cosa.
Un dato final de este estudio para tomar conciencia es que hablar por celular mientras se maneja incrementa el riesgo de accidentes al mismo nivel que hacerlo con 1.0 gr/L de alcohol en sangre.
Asimismo, hablar o mandar mensajes de texto mientras se maneja ocasiona que el conductor desvíe la mirada de la carretera, quiten las manos del volante o manubrio y aparte la mente de la carretera y del acto de conducir, explica la Organización Mundial de la Salud (OMS). En el conductor, estas distracciones pueden aumentar el tiempo de reacción para frenar o ante señales de tránsito, como semáforos; acortar la distancia de seguridad con otros autos, y en general reducir la atención sobre el camino.
La información recopilada por la OMS en el reporte Uso del celular al volante: un problema creciente de distracción del conductor, muestra que a pesar de la dificultad metodológica para conocer el impacto de las distracciones por el celular en los accidentes de tránsito, la evidencia de algunos países permite afirmar que las distracciones ocasionadas por el uso del celular se relacionan con mayor riesgo de sufrir accidentes viales, hasta cuatro veces más (OMS, 2011).