La crisis en la Comisión Nacional de los Derechos Humanos continúa. Ayer, cuatro integrantes del Consejo Consultivo del organismo autónomo presentaron su renuncia en forma de protesta por considerar que los cuestionamientos a elección de Rosario Piedra Ibarra como ombudsperson nacional le restan legitimidad.
Amnistía Internacional consideró que no es aceptable que la designación de Rosario Piedra al frente de la CNDH, se haya dado en esas condiciones.
“La grave crisis de Derechos Humanos en México solo puede enfrentarse con un órgano autónomo, independiente y legítimo, que sea el contrapeso del Estado y defienda los derechos de todas las personas”, advirtió la organización a través de su cuenta de Twitter.
Ante los cuestionamientos, Piedra Ibarra publicó una carta en su cuenta de Twitter donde asegura que agradeció a los senadores que votaron por ella, y a quienes no lo hicieron les prometió poner todo su empeño para cumplir su encomienda.
Por la mañana, Angélica Cuéllar, Mariclaire Acosta, María Ampudia y María Olga Noriega presentaron su renuncia al Consejo Consultivo, el cual se quedó con sólo tres de sus ocho integrantes originales.
“Hemos llegado a la convicción de que, si permanecemos en la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, estaremos en riesgo de incumplir el mandato de “Cumplir y Hacer Cumplir la Constitución”, emitido por el Senado de la República a nuestras personas cuando tomamos posesión del cargo de Consejeras del Consejo Consultivo”, afirmaron en una misiva dirigida a la presidenta de la Cámara de Senadores, Mónica Fernández.
Esta renuncia se suma a la de Alberto Athié, quien hizo lo propio desde el miércoles por la noche. Ahora, el Consejo se queda con sólo Mónica González Contró, David Kershenobich Stalnikowitz y Carmen Moreno Toscano.
En el Senado, siguió la confrontación entre la oposición y Morena, ya que los primeros colocaron en el patio del recinto legislativo una manta con la leyenda “Senado de luto. Murió la autonomía en la CNDH”.
Sion embargo, sí hubo un momento para limar asperezas. Por la mañana, el senador Gustavo Madero se acercó a la presidenta del Senado, Mónica Fernández, para pedirle una disculpa por la trifulca del martes pasado durante la toma de protesta de Piedra Ibarra.
En el diálogo que duró unos instantes, se pudo observar que el panista le dijo algo a Fernández, quien giró su silla mientras lo escuchaba.
Mientras tanto, dos jueces en materia administrativa desecharon por notoriamente improcedentes los juicios de amparo que promovieron el senador independiente Emilio Álvarez Icaza y la asociación Derechos Humanos y Litigio Estratégico Mexicano contra la designación de Rosario Piedra Ibarra como presidenta de la CNDH.
Sin embargo, los recursos legales no terminan ahí, ya que el Partido Revolucionario Institucional anunció que impugnará la elección de la presidenta de la CNDH.
Pese a los reclamos, la ombudsperson reaccionó de forma tranquila. En su mensaje en Twitter, aseveró que ya presentó su renuncia a Morena y que será una presidenta de la Comisión Nacional que esté afuera con las víctimas, no detrás de un escritorio.
“Mi compromiso ha sido, es y será con las víctimas, con la justicia y con la defensa de los derechos humanos, y lo acreditaré con hechos. Estoy convencida de que la Comisión requiere de una reforma profunda, y la impulsaremos escuchando a todas y todos y en un diálogo permanente con el Poder Legislativo”.
En tanto, el presidente Andrés Manuel López Obrador, minimizó las críticas a Ibarra Piedra, al considerar que son parte de los conservadores que no quieren que cambie la CNDH.
"Lo que hay en el fondo de este asunto es una oposición legítima del PAN y de los que habían manejado durante todo el periodo neoliberal la Comisión Nacional de los Derechos Humanos con muy malos resultados porque nunca hicieron nada efectivo para castigar a violadores de derechos humanos", externó.
Durante la conferencia mañanera, López Obrador fue cuestionado sobre el impedimento legal de Piedra Ibarra para asumir el cargo de la CNDH por ser consejera nacional de Morena, por lo que dejó claro que esto le corresponde al Senado de la República determinar los requisitos que hicieron viable la postulación.
"No es un asunto que nos corresponda a nosotros. Es una cuestión que tiene que ver con el Senado y que tiene que ver con las instancias encargadas de garantizar el cumplimiento de las leyes", apuntó.
Insistió en que fue una buena decisión el haber nombrado a Rosario Piedra Ibarra al frente del organismo defensor de los derechos humanos, por lo que confió en que se termine con la simulación en materia de defensa de los derechos humanos.
CON INFORMACIÓN DE CARLOS LARA, MANRIQUE GANDARIA Y JACOB SÁNCHEZ