“Lo que comemos es la principal causa de riesgo de cáncer, con 36%, delante del consumo de tabaco, con 31%; y las infecciones, 11%”, dijo Magda Carvajal, del Instituto de Biología de la UNAM.
Las aflotoxinas son sustancias cancerígenas presentes en los alimentos que consumimos a diario: maíz, arroz, cacahuates, nueces, pistaches, chile, pollo, huevo, leche, embutidos y cerveza, alertó.
“Las tortillas y sus derivados están contaminados con estos metabolitos secundarios provenientes del hongo Aspergillus flavus”, dijo la académica, quien, luego de un estudio, concluyó que en la capital del país, 95% del maíz blanco y 60% del amarillo están contaminados con aflatoxinas.
Al participar en el Seminario Permanente sobre Agricultuea, Alimentación y Nutrición del Programa Universitario de Alimentos, la especialista afirmó que “lo que comemos es la principal causa de riesgo de cáncer, con un 36%; delante del consumo de tabaco, responsable en un 31%; y las infecciones, con 11%”.
Las aflatoxinas, los cancerígenos biológicos más potentes, se asocian con cánceres de hígado, páncreas, pulmón, colorrectal y cervicouterino, indicó.