Como informó El Sol de México esta semana, los ductos de Pemex corren a través de 91 municipios, en los cuales el número de homicidios creció más que en el resto del país durante 2018. Entre los 20 municipios, donde más creció el número de asesinatos, existen lugares donde más del 50% de su población vive en pobreza. El gobierno de la República ha prometido canalizar programas sociales para inhibir el huachicoleo.