El temblor de hace dos años dejó como saldo a 7 mil 659 personas muertas o heridas, así como daños monetarios no cuantificados del todo, en lo que representó uno de los sismos más importantes en la historia reciente de México. Sin embargo, a la luz de la información generada por la sismología moderna, palidece cuando se le compara ante los terremotos más poderosos y mortíferos registrados. No obstante esto, los datos no reflejan las historias de sufrimiento y sacrificio de todas las personas que han experimentado una de estas catástrofes.