El Internet solo llega a cuatro de cada diez personas que viven en las zonas rurales de México, mientras que en las ciudades alcanza a siete de cada diez. Esta brecha se amplía en estados como Chihuahua mientras que en otros como Morelos se reduce considerablemente.
De acuerdo con un informe de la asociación civil The Social Intelligence Unit (SIU), las zonas rurales cuentan con características geográficas que complican el despliegue de infraestructura por parte de la iniciativa privada.
“Resulta fundamental estructurar no sólo una política de conectividad universal, sino una que pueda atender prioritariamente a las zonas rurales más desconectadas”, señala el documento.
Para lograr esta política de conectividad rural, el think thank propone aprovechar las tecnologías satelitales que tradicionalmente han sido usadas para prestar servicios de Internet en zonas rurales y remotas, además de considerar las características específicas de las comunidades, “ya que estas podrían ser las mismas que coordinen los esfuerzos para administrar una red local que les permita accesibilidad en condiciones justas”, finaliza el informe.