México enfrenta una gran discriminación étnica y cultural y desaparecer al Consejo Nacional Para Prevenir la Discriminación (Conapred) “sería un grave retroceso (...) no son tiempos de confrontar, sino tender puentes para construir un mejor país, ya de por si violento", declaró a El Sol de México, Lídice Rincón Gallardo, hija de quien fuera fundador de ese organismo gubernamental.
Es presidenta de la Fundación que lleva el nombre de su padre "Gilberto Rincón Gallardo’’, un político de la izquierda mexicana y luchador social, que fue candidato presidencial.
Lídice Rincón es una promotora de la paz, conferencista en igualdad, derechos humanos, discapacidad, democracia, género y discriminación; en ese sentido, destaca que México necesita de una agenda antidiscriminatoria, la importancia de seguir trabajando como sociedad, como país y como Estado. “Acudir a cada rincón para incidir en políticas incluyentes y fomentar una cultura pública’’.
Acudir con aquellas comunidades que históricamente están en situación de discriminación y vulnerabilidad por su color de piel, su forma de vestir, su apariencia, por la edad y la forma de hablar.
En esa condición se encuentran indígenas, campesinos, mujeres, niñas, niños, jóvenes, adultos mayores, personas con discapacidad y afromexicanos, a quienes hay que defender y proteger.
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