Ciudad del Vaticano.- Con la bendición del Papa, la Pontificia Comisión para América Latina del Vaticano y el Consejo Episcopal Latinoamericano preparan una cumbre de políticos católicos que tendrá lugar en México y para la cual serán invitados personalidades cercanas al presidente electo Andrés Manuel López Obrador.
En entrevista con Notimex, el secretario general del Consejo Episcopal Latinoamericano (Celam), Juan Espinoza Jiménez, brindó detalles de la reunión prevista del 15 al 17 de febrero de 2019 en la Casa Lago de la Conferencia del Episcopado Mexicano.
“Ante todo queremos nuevamente reunir a estos católicos con responsabilidades políticas y tener con ellos un diálogo abierto, fraterno, amistoso, solidario, un signo de unidad y comunión con ellos”, explicó.
“No pretendemos hacer ningún partido, ningún movimiento”, aclaró el clérigo, uno de los involucrados en la organización, cuyos avances serán comunicados al Papa Francisco la mañana de este viernes 21 de septiembre, cuando la comisión directiva del Celam sea recibida por él en el Vaticano.
Según lo programado, a la cita de febrero asistirán poco más de 100 personas, ocho políticos de cada país de la zona a excepción de México, que contará con 20 representantes, “por su amplitud y por tratarse del país anfitrión”. Completarán la lista dos decenas de obispos de diversos países.
Entre los invitados estarán incluidos, “sin duda alguna”, exponentes cercanos al futuro gobierno del presidente electo de México, Andrés Manuel López Obrador.
“El nuevo gobierno mexicano ha expresado que está abierto al diálogo, quiere escuchar a diferentes sectores de la sociedad, estar atento y abrir espacios de comunicación. El (presidente electo) así lo ha expresado y se ha mostrado interesado en un acercamiento a la Iglesia, y claro, la Iglesia también tiene ese interés”, reseñó Espinoza Jiménez.
“Sin duda, en el encuentro se dirá algo también de esto. Es fundamental lo que se pueda hacer en México en la relación entre el Estado y la Iglesia. No queremos competir en ningún momento, ni hacer sombra sino facilitar para que nuestra gente, creyente y no creyente, tenga una mejor vida”, abundó.
El origen de esta nueva reunión se puede encontrar en el primer “Encuentro de católicos con responsabilidades políticas”, que tuvo lugar en Bogotá, Colombia, en diciembre de 2017.
Aquella cita, recordó el clérigo, no tenía expectativa de sacar líneas de acción sino de verse las caras, conocerse. “Asistió gente de diferentes partidos, diferentes tendencias. Fue muy interesante y respetuoso”, añadió.
En esa oportunidad fueron invitados:
- El expresidente Felipe Calderón del Partido Acción Nacional (PAN),
- Las senadoras Dolores Padierna Luna, del Partido de la Revolución Democrática (PRD) y María del Rocío Pineda Gochi, del Partido Revolucionario Institucional (PRI),
- Además del director general adjunto de Asuntos Religiosos de la Presidencia de la República, Roberto Herrera Mena.
Así como los diputados federales
- Cecilia Romero Castillo, del PAN
- Bernardo Bátiz del Movimiento Regeneración Nacional (Morena)
- Ramón Lemus Muñoz Ledo, presidente municipal de Celaya; y
- Gregorio Ramírez Delgado, de la Fundación Ciudadana para el Desarrollo Integral de Michoacán.
- Además de Juan Carlos Romero Hicks de Guanajuato y
- El actual senador; Eruviel Ávila Villegas, exgobernador del Estado de México; y
- El exgobernador de Morelos, Marco Antonio Adame.
Al final de aquellos trabajos surgió la inquietud de dar un seguimiento a la actividad. Por eso se idearon convocatorias regionales, como esta ya establecida en México. Para el mes de abril se planea reunir a políticos de países sudamericanos.
La realidad que estamos viviendo ahora en Centroamérica y México amerita una reflexión, para ver por dónde van nuestros países, por donde va la política, qué está pasando con la democracia y qué tipo de democracia tenemos, qué gobiernos se están gestando
delineó Juan Espinoza.
“Por qué estas realidades que estamos viviendo las cuales parecen ir hacia atrás, con situaciones difíciles, duras, que son pagadas tristemente por la gente más pobre, por quienes tienen menos oportunidades, menos posibilidades”, añadió.
Estableció que, esta vez, sólo asistirán personajes abiertamente católicos, para abordar aspectos de la responsabilidad política desde la vivencia de la fe. El objetivo, continuó, es abrir un “espacio de diálogo y de reflexión”, que también proyecte futuras acciones concretas.