La Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) acreditó violaciones graves a las garantías individuales de la población durante el operativo del 19 de junio de 2016, en el municipio de Nochixtlán, Oaxaca, para desalojar un bloqueo carretero, motivo por el cual emitió la recomendación 7VG/2017, dirigida al gobierno y a la Fiscalía General de Oaxaca, así como a la Comisión Nacional de Seguridad y a la PGR.
En la presentación de la referida recomendación, el presidente de la CNDH, Luis Raúl González Pérez, detalló que lo ocurrido en Asunción Nochixtlán fue consecuencia “de un operativo indebidamente diseñado, preparado, coordinado y ejecutado”, en el que no se observaron plenamente los protocolos de actuación.
Agregó que en los sucesos, los elementos policiacos vulneraron entre otros los derechos a la vida, toda vez que fueron asesinados siete civiles; a la libertad, la integridad y a la seguridad personal; al principio del interés superior de la niñez; a una vida libre de violencia; al acceso a la justicia, a la verdad y a un recurso jurídico efectivo.
El organismo a su cargo dijo el ombudsman nacional solo pudo establecer de manera indiciaria que cuatro civiles fallecieron por disparos hechos por policías de Oaxaca, pero uno de los calibres encontrados en el cuerpo de una de las víctimas mortales, también coincide con las armas que portaban elementos de la Policía Federal. Por lo anterior, demandó que la PGR finque responsabilidades a todos los funcionarios implicados, pues el operativo se coordinó desde un hotel en la capital de Oaxaca, donde se conformó un grupo de coordinación integrado por representantes de las dependencias involucradas.