La noche del sábado, la madre de la periodista Denise Dresser fue extorsionada al recibir una llamada para advertirle sobre el falso secuestro de su hija.
La mamá de Denise hizo lo que los extorsionadores pidieron debido a que ya había sido amenazada anteriormente.
La comunicadora narró que su madre había salido de su casa en pijama y pantunflas, posteriormente manejó hasta la dirección que le habían indicado, dejó su carro en una esquina con las llaves puestas, y luego ingresó a un hotel en Tlalpan y pasó ahí la noche, recibiendo llamadas amenazantes a cada hora, esperando las instrucciones que el captor le comunicaba. “Cayó en la trampa que le tendieron con mucha habilidad y mucha información”, agregó.
Señalaron que la mujer permaneció por alrededor de 8 horas en la habitación, a donde le pidieron dirigirse con “sus tarjetas de crédito y los números de sus cuentas bancarias”.
Después de 8 horas, la madre logró comunicarse al exterior y salir del hotel a salvo tras hablar con alguien que pasó por su habitación.
“Logramos que mi madre saliera del hotel a salvo, y finalmente la recibí en casa, llorando de alivio y de dolor y de impotencia”, relató la comunicadora.
Luego de lo sucedido, Dresser se enteró de otras personas cercanas alas que le ocurrieron casos similares, y que “como tantos más han quedado impunes”.
El Gobierno de la Ciudad de México informó que ya se abrió una carpeta de investigación, pero aún se desconoce si la periodista realizó alguna denuncia.