Familiares de víctimas de desaparición forzada se reunieron en la Glorieta del Ahuehuete, en la Ciudad de México, para marchar a las instalaciones de la Fiscalía General de la República (FGR) y exigir la creación del Banco Nacional de Datos Forenses, el cual debió iniciar operaciones desde 2019.
Más de un centenar de integrantes de colectivos de Sonora, Chihuahua, Baja California, Baja California Sur, Hidalgo, León, Veracruz, Coahuila, Guerrero y Ciudad de México, entre otros, iniciaron el acto en la que ellos bautizaron la “glorieta de las y los desaparecidos” con una oración ecuménica para pedir por sus padres, madres, hijos, hijas y demás familiares que no han sido localizados.
“El motivo de estos encuentros es para nosotros muy elemental; dándole ese interés a esta glorieta, para tener aquí un espacio de memoria y estar todos aquí significa esa unión, ese fortalecimiento que todes sentimos y necesitamos para lograr nuestros objetivos; uno de esos es ese, visibilizar el dolor, el coraje, la frustración que llevamos dentro“, dijo la señora Mary al hacer uso de la palabra.
Al concluir sus actividades sobre Reforma, los familiares que integran la Red de Enlaces Nacionales, acompañados por el Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez (Centro Prodh), partieron con consignas hacia la FGR en donde realizaron una clausura simbólica como reclamo ante la crisis de desaparecidos y de identificación de cuerpos, que ya ascienden a más de 52 mil, según cifras oficiales.
“La Fiscalía está clausurada porque no contamos en México con un Banco Nacional de Datos Forenses que atienda la grave crisis humanitaria que padecemos (…) nos urge contar con recursos suficientes para que las instituciones puedan realizar sus labores”, exigieron a las afueras de la FGR.
Denuncian también que la institución encabezada por Alejandro Gertz Manero, además de incumplir con la identificación de cuerpos, ha quebrantado su obligación de concentrar los datos forenses del país, pues sólo cuenta con la información genética de 15 mil personas no identificadas.
Es decir, explican, la información de dos de cada tres cuerpos no se encuentra en la base de la FGR, cifra que se suma a que apenas el uno por ciento de las identificaciones hechas en el país desde 2006 fueron hechas por esta dependencia.
En mayo, luego de que México superó la cifra de 100 mil desaparecidos, expertos consultados por el Comité de las Naciones Unidas contra la Desaparición Forzada (CED, por sus siglas en inglés) aseguraron que se necesitarían más de 120 años para identificar a todas las víctimas si se continúa con el ritmo actual.