MEXICALI.- Al ser la sustancia fentanilo de uso común y de fácil acceso en los hospitales, personal médico opta por consumirlo como un liberador de estrés, debido a sus extenuantes jornadas de trabajo, pero se vuelve adicción, advirtió Ernesto Zúñiga, director general del centro de adicciones Misión San Carlos, de Mexicali, Baja California.
El secretario de Salud en el Estado, Guillermo Trejo Dozal, reconoció que dentro del gremio que representa hay casos de adicción a esta sustancia, aunque en incidencia leve que no causa alarma.
El tema se ha mantenido desde que se dio a conocer la muerte de una enfermera de un hospital público el mes pasado a consecuencia de una sobredosis de la sustancia que se utiliza a diario dentro de los quirófanos y que al ser un medicamento controlado es utilizado como una droga que relaja.
El director del centro de adicciones Misión San Carlos, comentó que el uso del fentanilo es sumamente controlado y vigilado por médicos de los diferentes hospitales. “La persona que está en la parte médica tal vez lo que busque es mantenerse en condiciones de seguir trabajando; normalmente los que tienen el acceso directo son los anestesiólogos, y quienes se ven tentados en caer a este tipo de adicciones”.
Comentó que un médico y dos enfermeras del sector público han sido tratados en la clínica profesional en adicciones y salud mental Misión San Carlos por su adicción al fentanilo, en donde se les brindó la atención oportuna para salir de su enfermedad.
“Lo que nos dice la Organización de las Naciones Unidas es que las adicciones son una enfermedad, sólo que ahora lo que preocupa es que sea el mismo médico quien tenga acceso”, dijo Ernesto Zúñiga, quien señaló que aunque ya existen campañas de prevención, éstas deben intensificarse, incluso al interior del sector público de salud, para que la ciudadanía en todos los rubros esté consciente del peligro de usar este tipo de droga.
“La clave es insistir en la prevención, tal vez no nos metemos a fondo en esos casos por ser áreas de salud, yo estoy seguro que los protocolos en los hospitales ahí están”, dijo.
DROGA LLEGA A CHIHUAHUA
Chihuahua también tiene problema con la sustancia fentanilo, pero por el ingreso de forma ilegal, ya que su llegada en pastillas o en polvo quedó en evidencia desde enero, cuando autoridades federales decomisaron en el aeropuerto de la Ciudad de México cajas con la droga provenientes de Hong Kong y China, cuyo destino era un domicilio en ciudad Delicias.
El creciente número de muertes por consumo de fentanilo en Estados Unidos y Canadá, aunado al poderío de grupos criminales mexicanos que poco a poco se han apoderado de estos mercados, había despertado la preocupación del gobierno de México, sin embargo ahora ya es una realidad.
Hace apenas unos días en Azcapotzalco, Ciudad de México, se desmanteló un laboratorio de fentanilo, y el martes en la ciudad de Mexicali ocurrió la detención de un hombre de 29 años con 120 pastillas del químico.
Desde W2016 el fentanilo, una sustancia opioide sintética producida en laboratorios, reemplazó a la heroína como la principal droga culpable de las muertes por sobredosis en Estados Unidos.
La químico Lizeth Olivas Castillo narró que aunque su uso es en anestesias, una pequeña dosis es altamente adictiva.
“Dicha sustancia es 40 veces más potente que la heroína y 100 más letal de la morfina... A menudo su uso es sublingual, por lo que es más potente que si se tomara con agua, incluso una dosis te va a hacer mucho más adicto, señaló.
“Relativamente es muy fácil conseguirla –una ampolleta- me he topado con que se vende en redes sociales o por internet, pero es cara, los efectos secundarios son altamente peligrosos”.
“El gran reto para las autoridades es que es muy fácil procesarla, cualquier persona con conocimiento en química puede realizar pastillas”, señaló.