Chiapas.- Un grupo de hondureños que viajaba con la caravana migrante esta mañana, sobre el poblado de Huehuetán, que pretendían llegar esta tarde a Huixtla, prefirieron quedarse a mitad del camino y entregarse de manera voluntaria a elementos del Instituto Nacional de Migración (INM).
A pesar de los operativos y vigilancia que la Policía Federal y elementos del INM han montado en diversos puntos de la ruta migrante, algunos viajeros han comentado que dentro de la misma caravana no se sienten completamente seguros, ya que existen personas infiltradas, presuntos integrantes de pandillas.
Esta tarde, en el cruce del puente de Huehuetán, un pequeño grupo de hondureños prefirió desistir ya que aseguran, temen por su seguridad, pues detectaron a personas que les parecen sospechosas, se sentían perseguidos dentro de la caravana por estas personas, esto les causó tanto temor por sus propias vidas o por ser vendidos a grupos criminales en el camino.
A pesar del temor que también les genera el ser detenidos por migración o la policía y tener que pagar alguna condena al regresar a su país de origen, los migrantes optaron por entregarse a las autoridades migratorias.
Durante el trayecto de los migrantes, El Sol de México pudo constatar la presencia de camionetas del INM detenidas en el camino, los migrantes prefieren esperar a reagruparse antes de pasar cerca, esto por el temor de ser detenidos.
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Por ello que los elementos de la Policía Federal y del Instituto Nacional de Migración constantemente se acercan para explicar que solo están cuidando la seguridad de los viajeros.
En cuanto al grupo de hondureños que decidió entregarse, las autoridades les explicaron sus derechos y opciones que tenían para poder regresar sin mayor problema a sus países de origen.
En primera instancia reciben refugio y atención medica durante 45 días con derecho a una prórroga por otros 45 más.