Apesar de que durante el sexenio de Enrique Peña Nieto el programa de estancias infantiles de la entonces Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol) se duplicó en número de establecimientos y beneficiarios, no pasó lo mismo con el presupuesto, en donde a lo largo de seis años sólo se incrementó 14 por ciento.
De acuerdo con los Informes de Gobierno de la pasada administración, entre 2013 y 2018 el número de estancias infantiles subrogadas por Sedesol pasó de cuatro mil 956 a nueve mil 354, lo que representa un aumento de 88.7 por ciento.
Cabe destacar que la forma como se incrementó el número de estancias ha sido criticada por la Auditoría Superior de la Federación, que en su auditoría de desempeño al Ejercicio Fiscal 2017 señaló que la mitad de las estancias están ubicadas en localidades con muy bajo grado de marginación, cuando el programa está enfocado en madres y padres con problemas económicos que requiere apoyos para el cuidado de sus hijos al momento de salir a trabajar.
En el caso de los beneficiarios, en el periodo mencionado, el número se incrementó aún más que las estancias. Los niños registrados pasaron de 138 mil 881 a 310 mil 628, es decir, un aumento de 123 por ciento.
Pese a estos aumentos, el presupuesto destinado al programa se mantuvo relativamente estable. Para el ejercicio fiscal 2013 alcanzó los tres mil 547 millones, cuando el año pasado llegó a los cuatro mil 70 millones, un aumento de 14 por ciento.
Hay que recordar que durante el sexenio pasado, debido a la situación económica tanto nacional como internacional, la administración federal realizó recortes presupuestales a diversos rubros.
Ahora, el programa de estancias infantiles está en análisis por presuntos actos de corrupción en la asignación de recursos a las personas dueñas de los establecimientos subrogados; el gobierno federal piensa dar apoyos económicos directamente a las madres.
