Aunque tengamos diferencias con (Carlos) Salinas y lo considero como un mal gobernante, que es el padre de la desigualdad moderna, en el tema de sus hijos no me meto, porque qué culpa tienen ellos, expresó el presidente Andrés Manuel López Obrador al preguntarle sobre los nexos de Emiliano Salinas con una secta sexual.
Señaló que la Presidencia de la República no debe hacer un juicio en este sentido, pues no le corresponde, “sería una postura política, los hijos tienen que asumir sus responsabilidades, por qué un hijo va a pagar por la mala actuación de un padre, además no nos corresponde legalmente, la familia no, es un asunto de moral pública, de moral política”.
Al ser cuestionado sobre este tema en su conferencia de prensa, López Obrador indicó que la Fiscalía General de la República (FGR) es autónoma y le corresponden a ella investigar estos asuntos, “políticamente sostengo que no demos de meter a la familia, aunque tengamos diferencias en este caso con (Carlos) Salinas”.
El mandatario federal sostuvo que tiene sustento, bases, para decir que “es el padre de la desigualdad moderna”, por todo el traslado que hicieron de bienes de la nación a la iniciativa privada, “fue como una piñata, entregaban las empresas a sus allegados, eso lo condeno, pero con lo de sus hijos no, no me meto”.
Durante un juicio en Nueva York, Emiliano Salinas fue ligado a la red NXIVM como uno de los presuntos cómplices de Keith Raniere, el líder de la organización de autoayuda acusada de crear una secta de esclavitud sexual.