/ lunes 23 de marzo de 2020

La 4T dejó de lado el gasto en vigilancia epidemiológica

Comparado con epidemias previas, AMLO planea gastar 36% menos de lo que Felipe Calderón destinó durante la crisis de la influenza H1N1 y 28% menos de lo que Peña Nieto erogó para hacer frente al virus del Zika

El gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador recortó el gasto destinado a vigilancia epidemiológica para este 2020, sin saber que en pocos meses su administración enfrentaría una crisis sanitaria por la pandemia mundial de Covid-19.

De acuerdo con el Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) 2020, este año se aprobaron 532.7 millones de pesos para el programa presupuestal U009 Vigilancia Epidemiológica, a cargo del Centro Nacional de Programas Preventivos y Control de Enfermedades (Cenaprece) y la Dirección General de Epidemiología.

Esto es 20.5 millones de pesos menos respecto a los 553.2 millones autorizados durante 2019.

Comparado con epidemias previas, la 4T tiene planeado gastar 36% menos de lo que Felipe Calderón destinó durante la crisis de la influenza H1N1 y 28% menos de lo que Enrique Peña Nieto erogó para hacer frente al virus del Zika.

La vigilancia epidemiológica es un instrumento de salud pública fundamental porque permite registrar sistemáticamente la ocurrencia de enfermedades con el fin de conocer su comportamiento entre la población y trazar acciones sanitarias para su control o eliminación.

El 22 de noviembre del año pasado, la Cámara de Diputados aprobó el PEF 2020 con el voto mayoritario de Morena y sus partidos aliados en el Congreso, recortando el gasto para la vigilancia de enfermedades potencialmente contagiosas.

Un mes después, las autoridades sanitarias de la ciudad china de Wuhan detectaron una nueva clase de neumonía desconocida hasta ese momento. El extraño brote, originado en un mercado mayorista de pescados y mariscos, prendió una alerta mundial.

El nuevo virus fue bautizado con el nombre de SARS-CoV2 y la enfermedad que ocasionaba, como Covid-19, perteneciente a la familia de los coronavirus.

La enfermedad comenzó a extenderse por todo el planeta. El 28 de febrero México registró el primer caso de Covid-19 y para el 11 de marzo la Organización Mundial de la Salud (OMS) ya reconocía una pandemia global.

El presupuesto más bajo en los últimos 12 años

El gasto aprobado en 2020 para vigilancia epidemiológica es el más bajo desde 2009, año en que México tuvo que hacer frente a la epidemia de la influenza H1N1, que como ahora también paralizó al país.

En esa ocasión, el gobierno del entonces presidente Felipe Calderón aprobó 836.5 millones de pesos.

Con la pesadilla que significó aquella crisis sanitaria, al año siguiente el gobierno federal incrementó a 1,290 millones de pesos el dinero destinado a dicho rubro.

A partir de 2011, el presupuesto se redujo significativamente y año con año ha ido menguando, salvo en 2016, cuando la epidemia de virus del Zika contagió a varios países de América Latina, incluido México.

Ese año, el gobierno del expresidente Enrique Peña Nieto destinó 735.2 millones de pesos a vigilancia epidemiológica.

Con la llegada de AMLO al poder, el gobierno federal siguió recortando los recursos a esta actividad.


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El gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador recortó el gasto destinado a vigilancia epidemiológica para este 2020, sin saber que en pocos meses su administración enfrentaría una crisis sanitaria por la pandemia mundial de Covid-19.

De acuerdo con el Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) 2020, este año se aprobaron 532.7 millones de pesos para el programa presupuestal U009 Vigilancia Epidemiológica, a cargo del Centro Nacional de Programas Preventivos y Control de Enfermedades (Cenaprece) y la Dirección General de Epidemiología.

Esto es 20.5 millones de pesos menos respecto a los 553.2 millones autorizados durante 2019.

Comparado con epidemias previas, la 4T tiene planeado gastar 36% menos de lo que Felipe Calderón destinó durante la crisis de la influenza H1N1 y 28% menos de lo que Enrique Peña Nieto erogó para hacer frente al virus del Zika.

La vigilancia epidemiológica es un instrumento de salud pública fundamental porque permite registrar sistemáticamente la ocurrencia de enfermedades con el fin de conocer su comportamiento entre la población y trazar acciones sanitarias para su control o eliminación.

El 22 de noviembre del año pasado, la Cámara de Diputados aprobó el PEF 2020 con el voto mayoritario de Morena y sus partidos aliados en el Congreso, recortando el gasto para la vigilancia de enfermedades potencialmente contagiosas.

Un mes después, las autoridades sanitarias de la ciudad china de Wuhan detectaron una nueva clase de neumonía desconocida hasta ese momento. El extraño brote, originado en un mercado mayorista de pescados y mariscos, prendió una alerta mundial.

El nuevo virus fue bautizado con el nombre de SARS-CoV2 y la enfermedad que ocasionaba, como Covid-19, perteneciente a la familia de los coronavirus.

La enfermedad comenzó a extenderse por todo el planeta. El 28 de febrero México registró el primer caso de Covid-19 y para el 11 de marzo la Organización Mundial de la Salud (OMS) ya reconocía una pandemia global.

El presupuesto más bajo en los últimos 12 años

El gasto aprobado en 2020 para vigilancia epidemiológica es el más bajo desde 2009, año en que México tuvo que hacer frente a la epidemia de la influenza H1N1, que como ahora también paralizó al país.

En esa ocasión, el gobierno del entonces presidente Felipe Calderón aprobó 836.5 millones de pesos.

Con la pesadilla que significó aquella crisis sanitaria, al año siguiente el gobierno federal incrementó a 1,290 millones de pesos el dinero destinado a dicho rubro.

A partir de 2011, el presupuesto se redujo significativamente y año con año ha ido menguando, salvo en 2016, cuando la epidemia de virus del Zika contagió a varios países de América Latina, incluido México.

Ese año, el gobierno del expresidente Enrique Peña Nieto destinó 735.2 millones de pesos a vigilancia epidemiológica.

Con la llegada de AMLO al poder, el gobierno federal siguió recortando los recursos a esta actividad.


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