Omar tuvo que huir de México porque los mensajes que recibía en su celular eran amenazantes. Los textos decían que lo matarían, lo desaparecerían por ser homosexual y ser portador de VIH. Después fueron las fotos. En ellas mostraban sus actividades, desde que salía de su casa, en el gimnasio o en el restaurante con sus amigos.

Ante la presión, Omar fue a las autoridades de la Ciudad de México. Levantó un acta. “Te están jugando una mala pasada y te están generando miedo, debe ser un amigo”, fue la primera respuesta de la policía de investigación. Después fueron las llamadas y los mensajes de muerte en su casa. “Puede que sea un novio al que no le cumpliste”, le dijeron después los investigadores.

Ahí comenzó el calvario. Omar tuvo que salir del país desde año pasado. El destino: Canadá. Dejó a su vida en México porque su integridad estaba en riesgo. En Toronto, se unió a la Fundación Latinos Positivos, que le ayudó a establecerse y buscar la asesoría para obtener el asilo.

El caso de Omar no es el único, contó a El Sol de México Ower Alexander Oberto, director de esta organización, quien explicó que la falta de medicamentos, discriminación y hasta persecución por ser portador de VIH, orilla a muchas personas a solicitar el asilo en Canadá.

En el caso de México, tienen 90 casos donde han brindado el apoyo legal para acceder a un programa de asilo y por ende a los servicios de salud.

Detalló que a esta organización han llegado, en los últimos meses, decenas de mexicanos que huyeron del país por la falta de medicamentos y tratamientos que no fueron brindados a tiempo.

Pero no sólo se trata de falta de medicamentos por desabasto, sino que hay discriminación laboral e inclusive casos de persecución por el hecho de ser homosexual o ser portador de VIH.

Ower Alexander Oberto detalló que ante esta situación, la Fundación ha emprendido un apoyo legal con los ciudadanos mexicanos para que puedan acceder al asilo que brinda el Gobierno de Canadá, se protejan sus derechos humanos, tengan acceso a los medicamentos, así como la asesoría para encontrar un empleo.

“Son 90 mexicanos los que han llegado a nuestra fundación y que están en proceso de pedir asilo, debido a que en las instituciones públicas de salud en México no les han garantizado el acceso a sus medicamentos con lo que se pone en riesgo su vida. Tenemos casos en donde se da cuenta que enfrentan discriminación por ser homosexuales y más por ser portadoras de VIH”, dijo.

Omar contó a Organización Editorial Mexicana (OEM), que la Fundación ha sido un puente de apoyo para buscar el asilo en Canadá después de la experiencia que padeció en México. “Todos los mensajes y las fotografías serán de mucha ayuda para mí en este proceso, y sobre todo porque voy a tener también acceso a medicamentos que me fueron negados allá”.

Puntualizó que hasta ahora el proceso de asilo ha sido benéfico porque ya le fue retirado el pasaporte por parte de las autoridades migratorias canadienses, con el empleo que tiene en una tienda puede comprobar que vive de manera decorosa y ahora cuenta con los servicios de salud para atenderse por VIH y mantenerse como hasta ahora: indectable.