El fenómeno de la migración tiene varias facetas. Solo en Nuevo Laredo y Reynosa, Tamaulipas, hay 16 mil 350 niños, ciudadanos estadounidenses, que llegaron en busca de sus padres deportados. Y esto, sin incluir que de enero a junio de este año son 109 mil 296 los menores deportados de los Estados Unidos.
“Vemos un fenómeno totalmente nuevo en la repatriación de nuestros connacionales, vienen llegando con sus hijos ciudadanos americanos. Nada más en la frontera de Nuevo Laredo, Tamaulipas, hay 6 mil 350 niños y jóvenes ciudadanos americanos que llegaron a esa ciudad fronteriza, que tenemos que integrar al sistema escolar, de salud, a la vida cotidiana de la ciudad”.
Afortunadamente hay una ley en Tamaulipas y una instrucción del gobernador Francisco García Cabeza de Vaca al Instituto Tamaulipeco de los Migrantes (ITM) que busque su integración lo más rápido posible de estos niños y jóvenes que están llegando a nuestras fronteras, refirió su director, José Martín Carmona Flores.
Asimismo, comentó que en Reynosa “tenemos casi 10 mil niños americanos que se integran ya al sistema escolar, igual en Matamoros, Río Bravo y todas nuestras ciudades fronterizas”.
Estos niños también tienen derechos y los acompaña el ITM en acudir a los Consulados de Estados Unidos para que certifiquen y obtengan su pasaporte americano, porque si en un futuro estos jóvenes quieren regresar a su país de origen lo hagan por la vía correcta y la vía legal.
Estos servicios se hacen en coordinación con el Consulado General de los Estados Unidos de Matamoros y Nuevo Laredo donde a la fecha ya se entregaron 4 mil pasaportes americanos a estos niños.
Y es que a los padres de estos niños y adolescentes los deportaron de los Estados Unidos. “Sí, ellos vivían allá y esperaron la Ley de Amnistía por años y años, pero fueron deportados. Allá se quedaron los niños y vinieron a juntarse con sus padres de este lado de la frontera”.
Pero también se dan casos de retornos voluntarios ante el hecho de que cambiaron las Leyes Estatales de la mayoría de los Estados fronterizos, para darles facultad a las policías, a los sheriffes, a agentes de tránsito a pedir documentos de residencia y ciudadanía.
Y no es todo, lo que se ve venir de la política de los EU que planea expulsar a 3.5 millones de migrantes por la frontera norte. Y según las estadísticas de 2011 a la fecha, el 33% de la deportación es por las fronteras tamaulipecas.
¿No les ha significado la presencia de estos centenares de niños problemas en cuanto a logística en las escuelas y demás?
-Sí, pero hemos invitado a la sociedad civil por parte de nuestro ITM, a las organizaciones religiosas y las respuestas han sido muy positivas.
Por primera vez, el Fondo Federal de Atención a Migrantes que cuenta con 300 millones de pesos, otorgó al estado de Tamaulipas recursos entre 26 y 27 millones de pesos para la atención del fenómeno migratorio en nuestro estado.
Además, se cuenta con un Fondo del Estado para las Casas de Migrantes y la responsabilidad de nuestro Instituto para estar al frente de la problemática migratoria, sin descuidar a los migrantes en tránsito. Con especial atención a nuestros migrantes tamaulipecos que van a EU.
¿Qué ha pasado con los niños separados de sus padres?
-Tenemos dos situaciones: la de los niños centroamericanos que llegan acompañados. Entran al Programa de nuestro Instituto donde se les ofrece al igual que a los adultos ayuda, protección, alimentación, hospedaje y traslado.
En este caso como vienen los menores acompañados de padre o de madre, lo que hacemos es esperar que el DIF y el Instituto Nacional de Migración (INM), procedan con un protocolo que consiste en la identificación de la familia y si en efecto son sus padres para que ellos lleguen a su destino a través del programa.
En el caso de niños no acompañados menores de 18 años se les atiende entre el INM y el DIF donde a través de un protocolo de identificación de familiares vengan a recoger al menor.
De otra forma, una autoridad de su lugar de origen autorizado ya por el protocolo que establece el INM y el DIF, pasan con nosotros a nuestro Instituto que tiene todos los programas de traslado, alimentación, comunicación, etc.
Como ITM atendemos a mexicanos que son repatriados por Tamaulipas. El ICE y la Border Patrol utilizan los puentes de Reynosa y el de Nuevo Laredo.