Cementerio de Islas Marías no será reubicado

Aquí quedarán las historias de las aproximadamente 40 personas que fueron enterradas en el cementerio local y sus tumbas y lapidas serán respetadas

Manrique Gandaria | Enviado

  · domingo 17 de marzo de 2019

Foto Ernesto Muñoz | Enviado | El Sol de México

Islas Marías.- Ubicado atrás de la clínica de Seguro Social, el panteón de Islas Marías quedará intacto ante el cambio de penal federal a centro de educación cultural y ambiental.

Aquí también quedará la historia del Padre Trampitas y su amigo El Sapo. Cuentan los lugareños que el Padre Trampitas llego a la isla en la década de los 50 para hacerse cargo de la iglesia.

Foto Ernesto Muñoz | Enviado | El Sol de México

Su actitud dicharachera hizo que se ganara su apodo, por lo que era muy estimado por los internos.

A Islas Marías llegó un homicida apodado El Sapo a quien el padre intentó ganárselo como amigo, pero le era imposible, su actitud negativa y desconfianza hacía que siempre portara un machete en la cintura.

Con paciencia el padre fue ganándose su confianza y logró quitarle esa actitud negativa y acercarlo a la religión, incluso logró que dejara el machete que cargaba, pero sus errores del pasado lo alcanzaron, fue asesinado en Islas Marías y su cuerpo enterrado en el cementerio local.

Foto Ernesto Muñoz | Enviado | El Sol de México

El Padre Trampitas continúo con su misión religiosa y tras cumplir más de 70 años fue retirado del servicio sacerdotal. Murió en su natal Guadalajara y su última voluntad fue que lo enterraran junto a su amigo el Sapo, ahí en Islas Marías.

Aquí quedarán también las historias de las aproximadamente 40 personas que fueron enterradas en el cementerio local y sus tumbas y lapidas serán respetadas, e incluso recientemente fueron repintadas.

El último registro que se tiene fue el suicidio de una interna en 2005 y que fue enterrada ahí, junto a las tumbas de niños que fallecieron entre 1950 y 1960 por una epidemia. Personal de custodios señala que sus almas vagan por las calles y dormitorios, y de vez en cuando se manifiestan haciendo bromas.

Foto Ernesto Muñoz | Enviado | El Sol de México

En Islas Marías los internos y sus familias que fallecieran podían ser enterrados en el panteón local o podían ser trasladados a su lugar de origen, dependiendo de su última voluntad.

El panteón formará parte del acervo de la isla y no planean desaparecerlo.