Un escándalo se generó al darse a conocer que el Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, envió una carta al Gobierno de España y al Papa Francisco con el fin de que pidieran perdón por los “agravios contra los pueblos originarios en la época de la Conquista”, sin embargo, esta disculpa ya había llegado a través del Tratado Definitivo de Paz y Amistad entre la República Mexicana y S.M.C. la Reina Gobernadora de España hace más de 180 años.
De acuerdo a la revista Forbes, este documento fue firmado por México y la Reina Isabel II, el 29 de diciembre de 1836 en el que se acordó “olvidar para siempre las pasadas diferencias y dimensiones, por las cuales desgraciadamente han estado tanto tiempo interrumpidas las relaciones de amistad y buena armonía entre ambos pueblos”.
En el Tratado Definitivo de Paz y Amistad se acordaron artículos y una “declaración particular secreta”.
Asimismo, en el Tratado se estableció de por vida una “amnistía general y completa para todos los mexicanos y españoles, sin excepción alguna, que pueden hallarse expulsados, ausentes, desterrados, ocultos, o que por acaso estuvieren presos o confinados sin conocimiento de los gobiernos respectivos”.
Además, se estipula en este documento que dicha amnistía debía darse “por la alta interposición de que se cimiente sobre principios de justicia y beneficencia la estrecha amistad, paz, unión que desde ahora en adelante, y para siempre, han de conservarse entre sus súbditos y los ciudadanos de la república mexicana”.
Ayer López Obrador aseguró que al enviar una carta el pasado 1 de marzo, al rey Felipe VI y otra al Papa Francisco para disculparse por los agravios cometidos durante la conquista fue con la finalidad de concretar en 2021 la “reconciliación histórica” ya que se conmemoran 200 años de la consumación de la Independencia y 500 años de la caída de Tenochtitlán.
El gobierno español rechazó la carta que el presidente de México le hizo llegar, mientras que el Vaticano optó por no hacer declaración alguna ante la situación, sin embargo, el portavoz interino de la Santa Sede, Alessandro Gisotti, aseguró que tiempo atrás “el Papa ya pidió perdón por la conquista de América”.
Otra de las cosas que generó polémica fue la filtración de este documento en el que el Presidente de la República había enviado dichas cartas, por lo que aclaró que si no se había hecho público fue “por respeto”.
El primer mandatario también confirmó que “no habrá confrontación con el gobierno de España ni con ningún gobierno” y que simplemente “es un planteamiento para hermanar más a nuestros pueblos”.
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