Aunque es un hospital de primer nivel, el Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias (INER) no cuenta con personal suficiente ni para supervisar el uso correcto de los medicamentos que surte, señala una auditoría de su Órgano Interno de Control fechada en marzo del año pasado.
El Departamento de Farmacia Hospitalaria del nosocomio no tiene capacidad humana para llevar a cabo “estudios de utilización de medicamentos” y el poco personal disponible tiene que abocarse a garantizar las acciones esenciales de seguridad del paciente, indica el documento.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), más de la mitad de los medicamentos se prescriben, dispensan o venden de forma inapropiada en todo el mundo, y México no está exento.
Los estudios de utilización de medicamentos son útiles para detectar su uso excesivo, insuficiente o indebido y actuar en consecuencia para reducir el problema. Pero dichos estudios no existían en el INER hasta hace un año.
Actualmente el hospital localizado al sur de la Ciudad de México, es uno de los centros de salud con más demanda para atender casos de Covid-19, sin embargo, carece de médicos y enfermeras para hacer frente a la crisis.
La mañana del pasado martes 17 de marzo, trabajadores del INER se manifestaron por la falta de insumos básicos y protocolos claros para poder atender a pacientes con coronavirus. Además exigieron la contratación de más personal para atender a las personas contagiadas con la enfermedad.
Jorge Salas Hernández, director del instituto, indicó que el INER tiene un déficit de al menos 300 enfermeras y 200 médicos, así como otros 400 trabajadores de diferentes áreas.
La auditoría 01/2019 también revela que en junio de 2014 el INER pagó 778 mil 234 pesos a la empresa Mexicana de Electrónica Industrial, S.A. por la adquisición de un software que serviría para llevar un mejor control en la dispensación de medicamentos de la Farmacia Hospitalaria.
Sin embargo, el Órgano Interno de Control no encontró evidencia de que el sistema denominado Farmatools haya sido utilizado hasta marzo de 2019, mes en que está fechada la auditoría.
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