“No soy un robot’’, tengo sentimientos, ¡sí la salude¡ respondió el presidente López Obrador de la mamá del narcotraficante Germán Loera El Chapo Guzmán, una señora de 92 años; la “peste’’ es la corrupción no un adulto mayor, a veces tengo que dar la mano porque eso es mi trabajo y a veces tengo que dar la mano a delincuentes de cuello blanco.
"Como la voy a dejar con la mano extendida", dijo el mandatario.
Por las medidas estoy procurando lograr sana distancia y voy a seguir haciéndolo, dijo el mandatario en su mañanera.
La verdad es irrespetuoso, es difícil humanamente no soy un robot, tengo sentimientos.
En su conferencia mañanera recordó que en su gira por Sinaloa la mamá del Chapo le entregó una carta, “y como todas las madres todavía no conozco que acepte, y dijo que no se quiere morir sin ver a su hijo y pide que se gestione para que pueda verlo y voy hacer el trámite y por rezones humanitarias se debería ir, con cuidados, lo haría por cualquier ser humano’’.
López Obrador apuntó que hubo un gobierno conservador que negoció con el hijo de la señora, esa hipocresía, que acepten que no somos iguales, no aceptamos complicidad con nadie, es una situación humanitaria y lo haría ante cualquier circunstancia parecida aunque se vengan encima los conservadores y sus voceros y los asalariados al servicio de los conservadores.
Todo ello, luego de que este domingo comenzara a circular en redes sociales un video en el que se aprecia como el Presidente se acerca a la camioneta de la madre del narcotraficante, sentenciado en Estados Unidos.