La Secretaría de Salud pide a jóvenes que no le quiten sus vacunas contra la influenza a la población en riesgo, tales como mujeres embarazadas, adultos mayores, niños menores de cinco años, personas con enfermedades crónicas y expuestas a bajas temperaturas.
El subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López Gattel, negó que la medida se deba a un desabasto por las políticas de austeridad, sino que obedece a las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud y al criterio técnico de vacunación utilizad desde hace más de 12 años.
“Si las personas adultas jóvenes menores de 60 años piden vacuna y quieren vacuna y se les vacuna, les están quitando la vacuna que a ellos y ellas no les está ofreciendo una ventaja de protección, se las están quitando a una persona adulta mayor o niño menor de cinco, o con enfermedades crónicas, o a una mujer embarazada que sí la necesita y que la debe recibir”, aseguró.
Aunque la directora del Centro Nacional para la Salud de la Infancia y Adolescencia, Miriam Veras Godoy, informó que las 32 millones 400 dosis son suficientes para contrarrestar el virus, advirtió a quienes no están en riesgo que, ni se molesten en pedir su inyección, porque no se las van a dar.
“Si son jóvenes, si son atletas, si se preocupan mucho por su salud, pero no están en los grupos de riesgo que señaló el doctor, no se molesten porque no se les aplique la vacuna”, comentó la funcionaria de Salud.
Aclaró que no hubo vetos en la compra de los medicamentos que costaron mil millones de pesos, sino que, para evitar casos de corrupción, prefirieron adquirirlas con la empresa paraestatal Laboratorios de Biológicos y Reactivos de México S.A de C.V (Birmex) y Sanofi Pasteur, con quienes ya habían firmado un contrato multianual en el 2015.
Luego de que en el sexenio pasado, Grupos Fármacos Especializados, Distribuidora Internacional de Medicinas y Fármacos Maypo concentraban casi el 70 por ciento de las compras gubernamentales.