La Secretaría de Educación Pública desconoce si ha funcionado el programa de subsidios para que las universidades públicas estatales (UPES) sanen sus fianzas, esto porque carece de estudios de diagnóstico sobre si los 589.3 millones de pesos otorgados a estas instituciones ayudaron a reducir los pasivos por pensiones y jubilaciones, concluye la Auditoría Superior de la Federación.
“En 2017, a 11 años de operación del programa, la SEP desconoce en qué medida se atendió el problema público relativo a que las Universidades Públicas Estatales (UPES) tienen problemas financieros para el pago de pensiones y jubilaciones, a fin de lograr su viabilidad, debido a que no acreditó el efecto de los 589,310.5 miles de pesos otorgados en la reducción de los pasivos contingentes del sistema de pensiones y jubilaciones de las UPES”, dice la auditoría de desempeño de dicho programa.
Una de las razones por las que la ASF duda de la efectividad del programa es porque no hubo manera que la SEP acreditara que los recursos otorgados a las universidades de destinaran a su propósito original.
Este programa surgió para que la SEP ayudara a las universidades estatales que tienen problemas financieros debido a los pasivos de pensiones y jubilaciones de sus trabajadores.