Monterrey, N. L- En medio de estrictas medidas de seguridad y con cuatro operativos en los tres penales de Nuevo León y en el Centro Único para Mujeres (CUM) más de 500 internos fueron trasladados a penitenciarias de Morelos y Coahuila.
Aunque no se dieron problemas mayores, en determinado momento, familiares de los reos pretendieron detener el operativo al colocarse en las puertas de salida.
Extraoficialmente se supo que del Penal de Topo Chico fueron trasladados 300 internos, del de Apodaca 90 y del de Cadereyta 82. De este total de 472 reos federales, destacó, se encuentran líderes de células delictivas.
Los internos habrían sido llevados por carretera al Centro Federal de Readaptación Social número 18, ubicado en el Ejido Mesillas, en Ramos Arizpe, Coahuila.
Por lo que respecta a 40 internas del CUM serían trasladadas vía aérea a las al Centro Federal de Readaptación Social Femenil número 16, en el municipio de Coatlán del Río, en el Estado de Morelos.
Los operativos fueron supervisados por personal de la Comisión Estatal de los Derechos Humanos, asociaciones civiles y mandos policiales de los tres niveles de gobierno y participaron además, mil 600 elementos estatales, federales y militares. Se utilizados 19 autobuses y decenas de patrullas y vehículos especiales blindados.
Se dijo que se contrató un avión para el traslado de las internas al Penal de Morelos.
En un momento determinado familiares de reos intentaron parar el operativo al bloquear la salida pero no pasó a mayores y ahora los penales estatales quedan con poco más de siete mil internos.