Rosario Ibarra de Piedra fue condecorada este miércoles con la medalla Belisario Domínguez, protocolo al que asistió como testigo el presidente Andrés Manuel López Obrador.
Ibarra de Piedra es una luchadora social que en la guerra sucia de la década de los 70, desaparecieron a su hijo Jesús Piedra, desde entonces no ha dejado de buscarlo, deuda moral que tiene el Estado mexicano.
La medalla de honor la recibieron sus hijas Rosario y Claudia, evento al que asistieron miembros del gabinete presidencial, del Poder Judicial y de las Fuerzas Armadas, además de invitados especiales.
La medalla Belisario Domínguez es la máxima condecoración del Poder Legislativo y en su nombre habló la senadora Ifigenia Hernández Martinez.
En su discurso dijo que Rosario Ibarra fue lastimada por la violencia, pues le arrebataron a su hijo Jesús, causa que ha hecho una bandera permanente del derecho.
La senadora recordó el discurso histórico del chiapaneco ante los asistentes a la ceremonia solemne en la vieja casona de Xicoténcatl, antigua sede del Senado en el Centro Histórico.
Antes recibieron la medalla destacados académicos, líderes políticos, empresarios y de la función pública.
La senadora Hernández Martinez recordó el martirio peregrinar sobre el paradero de su hijo, lo que ha la fecha es una deuda moral del Estado.
Ibarra de Piedra, de 92 años de edad, fue una luchadora social, fue candidata presidencial, senadora y la pérdida de su hijo es un duelo perpetuo hasta la fecha.
En su pensamiento político y social ha pugnado por un México justo en todos los sentidos.