El presidente Andrés Manuel López Obrador reconoció que falló la primera etapa de la campaña contra el consumo de drogas.
Dado que los mensajes eran “muy subliminales” y “no se entendieron”, el gobierno federal optó por difundir mensajes más directos en donde se muestre “la amarga realidad”: desde los laboratorios de drogas, hasta consecuencias sociales como el suicidio y demencia.
“Lo cierto es que la primera etapa, porque tenemos que ser autocríticos, no ser autocomplacientes, no tuvo el efecto que queríamos, la primera etapa de esta campaña, ¿o ustedes consideran que pegó, llegó la primera etapa a la gente? Nada, porque hay concepciones distintas y se tienen que respetar”, aceptó durante la conferencia mañanera.
Además, analizan montar exposiciones en espacios público como el Zócalo Capitalino, para mostrar cómo son los laboratorios, mejor conocidos como “cocinas”, en las que se producen las drogas sintéticas.
Utilizarán el gasto de publicidad y los tiempos oficiales en radio y televisión para promover los nuevos mensajes, en los que también se detalla las acciones que se han tomado para desmantelar las cocinas.
“Esto que es muy fuerte hay quienes no lo ven correcto, y como lo que se planteó fue tan subliminal, no se entendió. Y lo que queremos, es informar, dar a conocer lo que pasa, entonces, por eso se optó por esta campaña ya más directa”, comentó.
Mientras que los primeros spots eran producidos por cineastas y tenían como principal consigna, abrir el diálogo entre padres e hijos, escuchar las necesidades de los niños y adolescentes, así como proporcionarles opciones de recreación.
Ahora son creados por la Secretaría de la Defensa Nacional y se difundirán imágenes explícitas referentes a muerte por sobredosis, consumo de drogas y descomposición social.